Fue el 13 de agosto de 1959, hace 65 años, que Volvo Cars entregó el primer automóvil equipado con un cinturón de seguridad de 3 puntos, una innovación de la marca sueca creada por Nils Bohlin, un ingeniero de seguridad en Volvo, que inicialmente generó mucha controversia pero fue rápidamente adoptada por todas las demás marcas.
Este fue un paso importante en la mejora de la seguridad vial. Pero su éxito no fue inmediato. De hecho, muchas personas, incluidos incluso periodistas en el campo, consideraban que el cinturón de seguridad era un obstáculo para la libertad individual: era ajustado e incómodo de usar.
Tomaría algunos años más para que la mayoría de los conductores y el resto de la industria automotriz se convencieran de que su uso era realmente obligatorio y salvaba vidas.
El modelo era un Volvo PV544 y la entrega se realizó en un concesionario de Volvo en la ciudad sueca de Kristianstad, convirtiéndose Volvo en el primer fabricante de automóviles del mundo en equipar sus automóviles de serie con cinturones de seguridad de 3 puntos en los asientos delanteros.
En el mercado nórdico, además del PV544, el P120 (Amazon) también recibió este valor añadido en términos de seguridad.
Volvo se aseguró de patentar la innovación y dejarla abierta, es decir, estaba completamente disponible para las marcas de automóviles que quisieran utilizarla. Todos los conductores podían beneficiarse de la tecnología de seguridad de Volvo, independientemente de la marca que estuvieran conduciendo.
Más tarde, en 1963, Volvo introdujo el cinturón de seguridad en los mercados estadounidense y otros. Sin embargo, antes del lanzamiento, Volvo realizó una serie de pruebas en vehículos equipados con diferentes tipos de cinturones de seguridad.
Los resultados no podrían haber sido más claros: el nuevo cinturón de seguridad de Volvo fue, con mucho, el que brindó la mejor protección para los pasajeros.
En 1967, la marca sueca presentó el estudio «Informe de 28,000 Accidentes» en una conferencia sobre seguridad vial en Estados Unidos. Este informe se había construido en base a datos recopilados en Suecia sobre todas las colisiones que involucraban vehículos Volvo en el año anterior.
Aquí también, los resultados fueron evidentes, y el estudio indicó claramente que el uso de cinturones de seguridad salvaba vidas y reducía la gravedad de las lesiones en un 50%-60%.