La revolución eléctrica no está resultando ser la fiebre del oro que los fabricantes de automóviles esperaban, al menos no para Ford. La ambiciosa división Model e de la compañía del Óvalo Azul continúa perdiendo dinero a un ritmo alarmante, con pérdidas financieras que se disparan a $5.1 mil millones en 2024 y proyecciones que sugieren un golpe aún mayor en 2025, entre $5 mil millones y $5.5 mil millones. A pesar de las crecientes ventas de vehículos eléctricos, la dura realidad es clara: el negocio de vehículos eléctricos de Ford sigue estando profundamente en números rojos, y el camino por delante parece anything but smooth.
Los EVs se están vendiendo—pero aún están perdiendo dinero
Las ventas de vehículos eléctricos de Ford en EE. UU. aumentaron 34.8% en 2024, con 97,865 unidades entregadas. Las ventas de híbridos vieron un aumento aún mayor, subiendo 40.1% a 187,426 unidades. Sin embargo, ninguna de las categorías se acercó a igualar las ventas de vehículos a gasolina de Ford, que siguen dominando con casi 1.8 millones de unidades vendidas el año pasado, una cifra que apenas se movió desde 2023.
Los números confirman lo que los fabricantes de automóviles han estado enfrentando: los EVs siguen siendo demasiado caros de construir, y los consumidores no los están adoptando al ritmo que los fabricantes esperaban. El CEO de Ford, Jim Farley, no se anduvo con rodeos, admitiendo que los camiones eléctricos y los SUV grandes tienen problemas “irreconciliables” debido a sus enormes baterías, mala aerodinámica y peso excesivo. En su opinión, los EVs simplemente no son una “buena tecnología” para remolcar, lo que plantea aún más dudas sobre la viabilidad a largo plazo de las camionetas totalmente eléctricas.
Retrasos y Cancelaciones Importantes de EV: Ford Pone el Freno
Con Ford luchando por hacer que los EV sean rentables, la compañía está reduciendo proyectos y retrasando modelos clave en un intento por controlar costos. Entre las bajas:
- La camioneta eléctrica de tamaño mediano—originalmente programada para lanzarse en 2026—ahora ha sido retrasada hasta finales de 2027, un retraso de 18 meses.
- El SUV eléctrico de tres filas que estaba destinado a desafiar al Model X de Tesla? Cancelado por completo en 2024 después de que Ford se dio cuenta de que no podía hacer que los números funcionaran. La decisión costó a la compañía $1.9 mil millones, un golpe financiero masivo para un modelo que ni siquiera llegó a producción.
John Lawler, el Director Financiero de Ford, lo expresó de manera directa:
“No pudimos armar un vehículo que cumpliera con nuestro requisito de ser rentable en los primeros 12 meses de lanzamiento, y nos mantenemos firmes en eso.”
La decisión marca un cambio importante en la estrategia de EV de Ford, ya que la compañía abandona proyectos de alto costo y se orienta hacia la asequibilidad y la hibridación.
El Nuevo Plan de Ford: EVs Más Baratos, Híbridos de Rango Ampliado y Plataformas Multiusos
Con las ganancias solo de EVs demostrando ser esquivas, Ford ahora se está volcando hacia vehículos eléctricos de rango extendido (EREVs), una solución similar a un híbrido donde un motor de gasolina actúa únicamente como generador para cargar la batería, pero nunca impulsa directamente las ruedas.
Este concepto, ya utilizado en el MX-30 R-EV de Mazda y que pronto debutará en el Ram 1500 Ramcharger 2026, podría darle a Ford una ventaja al eliminar la ansiedad por el rango mientras mantiene los beneficios de un tren motriz eléctrico. Es una señal de que el fabricante de automóviles se está recalibrando, adaptándose a las dudas de los consumidores en lugar de forzar un futuro totalmente eléctrico.
Además, Ford está cambiando hacia plataformas multi-energía—arquitecturas de carrocería unitaria y de chasis que pueden soportar trenes motrices de gasolina, híbridos y eléctricos por igual. Esta estrategia permite a Ford mantenerse flexible en un mercado volátil, ajustando rápidamente la producción según la demanda del consumidor en lugar de comprometerse completamente con los EVs.
La Carrera Contra el Tiempo: ¿2027 o Nunca?
La visión a largo plazo de Ford tiene sentido, pero hay un problema evidente: su próxima generación de EVs y EREVs más baratos no llegará al mercado hasta 2027. Eso deja un enorme vacío de dos años en el que Ford debe luchar para mantenerse competitivo mientras pierde miles de millones.
La situación destaca la lucha más amplia en toda la industria: mientras Tesla logró su primer año completo de ganancias en 2020, los fabricantes de automóviles tradicionales siguen invirtiendo dinero en electrificación sin ver retornos. Incluso General Motors, que acaba de anunciar que sus EVs finalmente están generando ganancias, tuvo que soportar años de dolor financiero para llegar allí.
¿Puede Ford Sobrevivir a la Guerra de los EV?
El camino por delante es incierto. Por un lado, la disposición de Ford a adaptar su estrategia, retrasar modelos no rentables y abrazar la tecnología híbrida podría salvarlo de un desastre financiero. Por otro lado, los próximos dos años serán brutales, con pérdidas multimillonarias y un mercado que no está adoptando los EVs a gran escala.
Ford está apostando fuerte a que un enfoque flexible y rentable lo mantendrá a flote mientras competidores como Tesla y fabricantes chinos inundan el mercado con EVs asequibles. Pero si la industria cambia demasiado rápido, Ford corre el riesgo de quedarse atrás en un juego que evoluciona rápidamente.
Por ahora, el mensaje del Óvalo Azul es claro: el futuro totalmente eléctrico ya no está garantizado. Los híbridos, los motores de gasolina y las soluciones de extensión de autonomía están de vuelta en la mezcla. Y si eso es lo que se necesita para sobrevivir, Ford está dispuesto a aceptarlo, que las pérdidas no importen.