Huawei ha presentado un supercargador de megavatio para vehículos eléctricos, completamente refrigerado por líquido, que se destaca por su capacidad máxima de 1.5 MW y una corriente de carga máxima de 2,400 Amperios.
El nuevo supercargador puede entregar 20 kWh por minuto, permitiendo que una batería de 300 kWh alcance una carga completa en solo 15 minutos.
Huawei afirma que este supercargador estará dirigido a vehículos pesados completamente eléctricos, y que el tiempo de carga de una batería representa una mejora de casi cuatro veces en la eficiencia de carga en comparación con las estaciones de carga rápida tradicionales.
Una innovación tecnológica clave es el sistema de refrigeración líquida inmersiva del supercargador. Este diseño aborda el desafío crítico del descontrol térmico, a menudo asociado con la carga de alta potencia, asegurando un funcionamiento estable en un amplio rango de temperaturas de -30 °C a 60 °C.
De esta manera, Huawei afirma que esto aumenta la fiabilidad, reduciendo la tasa de fallos en un 50% y extendiendo la vida útil del equipo a 15 años. El sistema incorpora chips de carburo de silicio (SiC) desarrollados por Huawei, que la marca china asegura ofrecen tres veces la densidad de energía de los componentes convencionales basados en silicio.
Huawei también ha anunciado que se han integrado recursos inteligentes, incluyendo un innovador algoritmo de asignación de energía que ajusta dinámicamente la potencia de salida, mitigando así los posibles impactos en la red eléctrica. El sistema también soporta la interacción vehículo-a-red (V2G), permitiendo un flujo de energía bidireccional.
En colaboración con State Grid, la Compañía Nacional de Redes Eléctricas de China, Huawei ha desarrollado un sistema de programación inteligente para gestionar dinámicamente la potencia de carga y reducir los picos de carga en la red hasta en un 40%.
Mirando hacia el futuro, Huawei anunció que ha establecido asociaciones estratégicas con importantes actores logísticos, con el objetivo del despliegue inicial de 5,000 vehículos eléctricos pesados compatibles con el nuevo sistema de carga en megavatios.
Sin embargo, la implementación de supercargadores de alta potencia como los de Huawei enfrenta desafíos globales, particularmente relacionados con la infraestructura eléctrica necesaria para soportar cargas tan altas.