Jacques Villeneuve, el franco campeón del mundo de Fórmula 1 de 1997, ha causado revuelo en el mundo del automovilismo con sus comentarios mordaces sobre el rendimiento de Yuki Tsunoda como compañero de Max Verstappen. Tras el Gran Premio de Hungría, donde Verstappen luchó por asegurar el noveno lugar, Villeneuve no se contuvo, calificando a Tsunoda como «probablemente el peor» compañero que Verstappen haya tenido jamás.
Las consecuencias del Gran Premio de Hungría han dejado a aficionados y expertos cuestionando el rendimiento de Red Bull, con Villeneuve liderando la crítica hacia la actuación mediocre de Tsunoda en la pista. Esto ocurre en un momento en que Red Bull ha estado enfrentando desafíos, incluyendo la reciente salida de Christian Horner y Laurent Mekies.
Las dificultades de Tsunoda en Hungría han levantado cejas y suscitado un debate sobre su idoneidad como compañero de un piloto del calibre de Verstappen. La evaluación directa de Villeneuve ha encendido una tormenta de discusiones en la comunidad de Fórmula 1, con muchos opinando sobre la controvertida declaración.
A medida que se asienta el polvo del Gran Premio de Hungría, todas las miradas están puestas en Red Bull y Tsunoda mientras navegan a través de lo que ha sido un período tumultuoso para el equipo. Con los comentarios de Villeneuve añadiendo leña al fuego de la ya intensa escrutinio, la presión está sobre Tsunoda para demostrar su valía y silenciar a sus críticos en la pista.