Ross Chastain y Ryan Blaney tuvieron un enfrentamiento en Bristol, similar al incidente del año pasado en Phoenix. El actual campeón de la Copa NASCAR reavivó su rivalidad con Chastain de Trackhouse Racing. El enfrentamiento entre los dos comenzó en la final de la temporada de 2023, cuando Chastain bloqueó agresivamente a Blaney, a pesar de no estar en el Championship-4, terminando por ganar la carrera.
Desafortunadamente, tuvieron otro encuentro en el Bristol Motor Speedway durante la Food City 500. Mientras luchaban por posición, Chastain golpeó a Blaney, haciéndolo salir de la línea y adelantándolo. Se tocaron dos veces durante este intento exitoso de Chastain.
Después de la carrera, Blaney expresó su frustración por el incidente con Chastain. Estaba cansado de que le preguntaran sobre Chastain y se negó a responder más preguntas de periodistas. Se alejó y se dirigió hacia su garaje.
Debido a los contactos y al desgaste extremo de los neumáticos, Blaney terminó la carrera en el puesto 16, mientras que Chastain logró terminar en una posición mejor, en el puesto 15. Dadas las capacidades de Trackhouse y Penske, es probable que este no sea el último enfrentamiento entre los dos pilotos.
Antes de la carrera, Chastain participó en una iniciativa de seguridad vial patrocinada por el título de la carrera y las autoridades locales. Visitó el Food City en Blountville y participó en un evento organizado por la Oficina de Seguridad en Carreteras de Tennessee. Chastain instó a los fanáticos de las carreras a conducir con responsabilidad y enfatizó la importancia del uso del cinturón de seguridad a través de demostraciones y discusiones.
La maniobra de Chastain en Blaney durante la carrera no puede considerarse totalmente insegura, ya que el coche Next-Gen es uno de los coches de carreras más seguros. Sin embargo, es crucial para Chastain priorizar la seguridad al arriesgarse en la pista.