Max Verstappen ha confirmado que una penalización por motor se cierne sobre su tramo final de la temporada 2024 de F1, con el circuito de Interlagos en Brasil emergiendo como un posible lugar para el cambio estratégico. La penalización llega en medio de preocupaciones sobre el rendimiento después de que los problemas con la unidad de potencia afectaran la velocidad en línea recta de Verstappen en el Gran Premio de la Ciudad de México, un problema que Red Bull luchó por resolver completamente durante la práctica del viernes.
Si bien Brasil es tentador debido a las amplias zonas de adelantamiento de Interlagos, Verstappen dice que aún no se ha tomado una decisión final. “No he escuchado nada todavía,” admitió. “No se ha discutido, pero sé que tendré que tomar una en algún momento. Así que ya veremos.”
Decidir cuándo y dónde asumir la penalización siempre es una apuesta, agregó Verstappen, ya que ningún circuito garantiza realmente una recuperación fácil. Sin embargo, si toma la penalización en Interlagos, solo la parrilla de salida para la carrera principal del domingo se vería afectada.
La consideración de Red Bull de Brasil como un lugar de penalización trae recuerdos de 2021, cuando Lewis Hamilton realizó una notable remontada para ganar desde el décimo lugar después de recibir una penalización en la parrilla por un cambio de unidad de potencia. El diseño característico del circuito, amigable para los adelantamientos, podría una vez más preparar el escenario para una carrera de recuperación de alto riesgo.
A medida que Red Bull trabaja para gestionar la situación de la unidad de potencia de Verstappen, el próximo Gran Premio de Sao Paulo se perfila como otro emocionante capítulo en la dramática lucha por el título de la temporada.