Max Verstappen hábilmente manejó la avalancha de preguntas sobre los recientes comentarios de su padre sobre Christian Horner después del Gran Premio de Bahréin. Los comentarios de Jos sobre la tensión dentro del equipo y Horner causando problemas reavivaron la polémica. Sin embargo, Max se mantuvo tranquilo durante sus entrevistas con la prensa, describiendo los días desde la carrera como «relajantes» y enfatizando que la especulación no afecta al equipo. Incluso lo vio como una señal de enfoque en el trabajo y el rendimiento en la pista.
Max dejó claro que estaba enfocado en el aspecto del rendimiento y quería menos discusión sobre la dinámica del equipo fuera de la pista. No respaldó explícitamente ni denunció los comentarios de su padre, pero reconoció que estaba con Jos hasta la mañana de la entrevista y que hablan regularmente. Max enfatizó que son un equipo, compuesto por él mismo, su padre y su manager, Raymond Vermueulen.
Cuando se le preguntó sobre su futuro con Horner y el equipo, Max simplemente afirmó que están juntos en este momento y expresó su deseo por un ambiente tranquilo. Confirmó su intención de permanecer con el equipo hasta el final de su contrato en 2028, siempre y cuando sigan teniendo un buen rendimiento. Descartó preguntas sobre la posibilidad de unirse a Mercedes o preocupaciones sobre la unidad de potencia de Red Bull en 2026, enfatizando la importancia de confiar en el proceso.
En cuanto a las discrepancias entre Horner y Jos, Max creía que podrían resolverse a través de la discusión y reconoció que es normal tener opiniones diferentes dentro de un equipo. Mencionó una conversación privada con el presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, sin dar detalles, sugiriendo que se produjo algún tipo de discusión.
Max dejó claro que Jos es honesto y franco, y aunque no lo cuestionó sobre los comentarios, creía que Jos quiso decir lo que dijo. Expresó la importancia de centrarse en el rendimiento del equipo y en el gran coche que tienen. Max no se vio afectado por las especulaciones sobre las motivaciones de Jos para los comentarios, afirmando que solo su padre sabe la verdad. Reconoció que las redes sociales son una plataforma para especulaciones y dejó en claro que no está enojado por lo que su padre dijo.
En general, Max manejó la situación con tacto y evitó tomar partido o alimentar la controversia. Su apoyo al status quo fue cuidadosamente formulado, dejando espacio para interpretación. Permaneció relajado durante las entrevistas y no mostró hostilidad hacia las preguntas o los comentarios de su padre. Es evidente que Max no quería estar en un lado diferente de su padre, pero también priorizó el enfoque en su rendimiento y en el éxito del equipo.