En una declaración contundente que indica su inquebrantable compromiso con su profesión, el actual Campeón del Mundo Max Verstappen afirmó que no se saltaría una carrera en la temporada de F1 2025, incluso si coincidiera con el nacimiento de su primer hijo. El comentario, hecho con un toque de ironía, fue una respuesta a la reciente represión de la FIA sobre las groserías, una acción disciplinaria que podría resultar en prohibiciones de carrera.
Verstappen, conocido por su feroz competitividad en la pista, se encontró en problemas durante el Gran Premio de Singapur 2024. El presidente de la FIA, Mohammed Ben Sulayem, había iniciado una campaña para eliminar las groserías de la serie, y Verstappen se vio atrapado en el fuego cruzado. Después de insultar durante una conferencia de prensa, se le ordenó realizar trabajos comunitarios en Ruanda, un deber que cumplió como parte de la gala de premiación de la FIA 2024.
La represión de la FIA continúa sin cesar en la temporada 2025, con los pilotos advertidos sobre las severas consecuencias por usar groserías. La sanción por una tercera infracción de conducta grosera es una multa considerable de $127,000 y una suspensión de un mes. Esta política estricta ha levantado cejas y ha generado debate entre la fraternidad de la F1.
Añadiendo leña al fuego, durante el tercer y último día de pruebas de pretemporada en Bahréin, una cámara a bordo del Red Bull RB21 de Verstappen pareció capturarlo haciendo un gesto con el dedo medio mientras conducía por el pit lane. El incidente, que ocurrió cerca de la pared de boxes de Williams, ha añadido una capa de incertidumbre a la situación. Sin embargo, el contexto exacto y la razón del gesto de Verstappen siguen sin estar claros.
En una entrevista con la publicación holandesa Algemeen Dagblad, Verstappen se tomó a la ligera la posibilidad de una prohibición de carrera debido a las groserías. Cuando se le preguntó si podría perderse una carrera por el nacimiento de su primer hijo, bromeó diciendo que era más probable que se viera obligado a perderse una carrera debido a una sanción por groserías.
Verstappen y su pareja, Kelly Piquet, hija del tres veces campeón del mundo de F1 Nelson Piquet, esperan su primer hijo en 2025. A pesar de la inminente llegada de su primogénito, Verstappen enfatizó su dedicación a su carrera, diciendo: “Es posible [que podría perderme una carrera], pero no lo haré.”
Comentó de manera franca que ser piloto de Fórmula 1 significaba que no podías tomarte un tiempo libre. «No soy yo quien da a luz,» dijo, subrayando su compromiso con su profesión. Verstappen también bromeó sobre la posibilidad de acumular demasiados puntos de penalización por maldecir, lo que podría resultar en una suspensión.
Además de sus bromas ligeras sobre la política de maldiciones de la FIA, Verstappen también necesita tener cuidado con su Superlicencia de la FIA, ya que actualmente tiene ocho puntos de penalización. Si acumula 12 puntos, enfrentará una suspensión de una carrera. No se descontarán puntos de su total actual antes de finales de junio, añadiendo otra capa de complejidad a su temporada de F1 2025.