El muy anticipado debut de Yuki Tsunoda en Red Bull en el Gran Premio de Japón dejó a los aficionados y expertos cuestionando su rendimiento. Con un decepcionante 15º lugar en la clasificación, Tsunoda comenzó la carrera en 14ª posición tras una penalización a Carlos Sainz, solo para terminar en un deslucido 12º lugar sin sumar puntos.
A pesar de que le dijeron que no necesita igualar la destreza de Max Verstappen, el rendimiento decepcionante de Tsunoda no fue lo que Red Bull tenía en mente cuando reemplazaron a Liam Lawson tras solo dos carreras. El piloto japonés mostró promesas a lo largo del fin de semana, pero no logró cumplir cuando más importaba, citando problemas con la preparación de los neumáticos durante la clasificación como un retroceso significativo.
Luchando por encontrar el ritmo adecuado y enfrentando desafíos para adelantar debido a una elección de alerón subóptima, la carrera de Tsunoda estuvo empañada por oportunidades perdidas y por estar atrapado detrás de coches más lentos. Sin embargo, se mantiene optimista sobre su progreso y está decidido a recuperarse en la próxima carrera.
El director del equipo, Christian Horner, expresó confianza en la capacidad de Tsunoda para mejorar y adaptarse al coche, insinuando mejores actuaciones en las próximas carreras en Baréin y Arabia Saudita. Con un triple encabezado en el horizonte, Tsunoda tiene la oportunidad de demostrar su valía y mostrar su verdadero potencial en la pista.
A pesar de un comienzo difícil, Tsunoda se mantiene positivo y decidido a esforzarse más en las próximas carreras, con el objetivo de tener un impacto más fuerte y dejar una impresión duradera en el altamente competitivo mundo de la Fórmula 1.