La renuncia de Carlos Tavares como CEO de Stellantis parece haber abierto la puerta para que el grupo automotriz reconfigure la estrategia que ha estado siguiendo.
Dirigido por el presidente John Elkann, Stellantis está actuando rápidamente para poner fin al legado de su ex CEO y reparar las relaciones con concesionarios, socios de la industria, gobiernos y trabajadores.
Con el grupo automotriz en busca de un nuevo CEO, los primeros signos de un cambio estratégico están surgiendo de Europa, donde Stellantis acaba de confirmar su regreso a la membresía de la Asociación de Fabricantes de Automóviles de Europa (ACEA), de la cual se retiró en 2022.
En ese momento, la prensa dejó claro que la salida de Stellantis de ACEA fue impulsada principalmente por desacuerdos entre Carlos Tavares y sus homólogos de otros fabricantes miembros, especialmente aquellos de origen alemán.
Además, las divergencias con el gobierno italiano liderado por la primera ministra Giorgia Meloni parecen haber cobrado un nuevo impulso, ya que el gobierno en Roma ahora está dispuesto a trabajar con Stellantis en su estrategia futura, siempre que la empresa mantenga empleos y fábricas en el país.
“Si el enfoque es constructivo, si hay voluntad de mantener fábricas y empleos, estamos listos para hacer nuestra parte,” declaró recientemente la primera ministra italiana.
Después de la sorprendente renuncia de Carlos Tavares como CEO, el gobierno de Roma ahora busca reparar las relaciones con Stellantis, que tiene 14 marcas, incluyendo Jeep, Ram, Fiat y Peugeot.
La tarea de reformular la estrategia está en manos de un comité ejecutivo interino, presidido por John Elkann, un descendiente de la familia Agnelli, que fundó Fiat hace más de un siglo. Elkann, quien también preside Ferrari y gestiona la holding familiar Exor, será responsable de liderar la selección del nuevo CEO, que se espera sea anunciado en la primera mitad de 2025.
Cabe destacar que Carlos Tavares reveló en una entrevista con el periódico portugués “Expresso” el pasado fin de semana que su renuncia a Stellantis se debió a desacuerdos con la Junta Directiva respecto a la estrategia.