Romain Grosjean entregó una actuación destacada en la Batalla sobre los Ladrillos del Campeonato IMSA SportsCar en Indianápolis, liderando la carrera por primera vez en el programa LMDh de Lamborghini. Al volante del Lamborghini SC63 #63 de Iron Lynx, Grosjean mostró el potencial del coche en la décima y penúltima ronda del Campeonato IMSA SportsCar 2024, marcando un hito significativo para Lamborghini.
Carga de Grosjean hacia el Frente en Condiciones Húmedas
La carrera, celebrada durante seis horas en el icónico circuito Brickyard, vio a Grosjean tomar el mando durante la primera hora afectada por la lluvia. Las fuertes lluvias inicialmente representaron un desafío, pero después de que los oficiales de pista lograron despejar gran parte del agua estancada, el Lamborghini prosperó. La destreza de Grosjean en condiciones de lluvia brilló mientras aprovechaba la oportunidad para liderar, ofreciendo el primer sabor de liderazgo en carrera para el nuevo esfuerzo LMDh de Lamborghini.
Reflexionando sobre el fin de semana, Grosjean se mostró optimista: “Creo que hay muchos aspectos positivos en este fin de semana. En mojado, volábamos, y el coche era realmente increíble. Logré tomar la delantera y alejarme, lo cual fue fantástico.”
A pesar de mostrar un buen ritmo, el equipo enfrentó desafíos operativos, que Grosjean reconoció: “Operativamente en IMSA, hay cosas que podemos mejorar un poco, pero en general, fue un fin de semana positivo. Fue una pena que tuviéramos que retirarnos.”
Los Altibajos de una Salida Competitiva
Grosjean lideró la carrera por primera vez durante el periodo de precaución inicial al quedarse en la pista mientras otros competidores entraban a pits. Después de la reanudación, realizó un audaz avance hacia el frente, liderando finalmente la carrera en una emocionante batalla con Porsche Penske y Cadillac.
La conducción asertiva de Grosjean lo llevó a enfrentarse con Mathieu Jaminet en el #6 Porsche Penske 963, superando a Jaminet entre las Curvas 13 y 14 después de que el piloto de Porsche perdió brevemente el control con un sobreviraje. Esta maniobra colocó al Lamborghini de Grosjean en una posición dominante al frente del grupo, pero el impulso del equipo pronto se vería interrumpido.
Errores Costosos y un Final Desafortunado
La carrera dio un giro negativo cuando el #63 Lamborghini recibió una penalización de drive-through debido a una infracción en la parada en pits después de que Grosjean entregó las responsabilidades de conducción a Matteo Cairoli. La penalización se emitió porque se vio a demasiados mecánicos trabajando en el auto sobre la pared de pits, una violación a los ojos del control de carrera.
Las esperanzas del equipo se desvanecieron aún más cuando Andrea Caldarelli, quien asumió después de Cairoli, sufrió daños en la suspensión trasera derecha tras un contacto con el Ford Mustang #55 de Proton Competition conducido por Ben Barker en la Curva 14. El incidente obligó al Lamborghini a abandonar la carrera, marcando un final desafortunado para lo que había sido una salida prometedora.
Mirando hacia Petit Le Mans
A pesar del contratiempo, Grosjean se mantiene enfocado en lo positivo y está decidido a regresar más fuerte para la final de la temporada en Petit Le Mans. “Analizaremos y lo haremos más fuerte y regresaremos para Petit Le Mans, que va a ser otra dura batalla,” dijo.
La primera incursión de Lamborghini en el liderazgo en la Batalla sobre los Ladrillos representa un paso significativo hacia adelante para el equipo mientras continúan desarrollando su programa LMDh. Con las lecciones aprendidas y una renovada determinación, Grosjean y el equipo Iron Lynx están ansiosos por aprovechar su impulso mientras miran hacia futuros desafíos en el Campeonato IMSA SportsCar.