Rick Hendrick, el propietario de equipo de NASCAR con más victorias y un entusiasta de los automóviles de toda la vida, ha añadido otra joya a su vasta colección de Corvettes. En la subasta Barrett-Jackson 2025 en Scottsdale, Arizona, Hendrick desembolsó la asombrosa cantidad de $3.7 millones por el primer modelo de producción del Chevrolet Corvette ZR1 2025. Pero mientras esta compra continúa una tradición querida para el magnate de los deportes de motor, los aficionados comienzan a sentir que es la misma historia cada año.
La obsesión de Hendrick por el Corvette: una pasión de toda la vida
El amor de Hendrick por los automóviles comenzó a los 15 años, reparando tractores y coches en mal estado en la granja de su familia en Virginia. Su primer coche, un Chevrolet Corvette de 1931 comprado con su padre por $250, encendió una pasión que ahora incluye 220 vehículos, de los cuales 122 son Corvettes.
Su última adquisición, el Corvette ZR1 2025, es una maravilla de la ingeniería:
- Motor: LT7 V8 biturbo de 5.5 litros que produce 1,064 caballos de fuerza a 7,000 rpm.
- Paquete Aero: Elementos de carbono que generan 1,200 libras de carga aerodinámica.
- Precio base: $174,995, aunque la oferta de Hendrick lo elevó a $3.7 millones.
Las características del automóvil son innovadoras, pero su precio no solo fue por lujo; los ingresos de la subasta fueron destinados a la caridad, apoyando a las víctimas de los incendios forestales en California y los huracanes del sureste en 2024.
Los Fans Muestran Frustración: «Mismo Evento, Diferente Año»
Aunque la compra de Hendrick beneficia una buena causa, algunos aficionados están expresando fatiga por la previsibilidad de esta tradición anual. El nombre de Hendrick se ha vuelto sinónimo de conseguir los primeros Corvettes de producción en Barrett-Jackson, y para muchos, se siente como un déjà vu.
En las redes sociales, algunos aficionados expresaron su frustración:
- «¿Tiene que comprar Rick Hendrick cada primer Corvette? ¡Lo entendemos, te encantan los Corvettes!»
- «Gran causa, pero ¿podemos variar un poco? Esto está empezando a parecer un Día de la Marmota.»
Equilibrando Legado y Repetición
No se puede negar las contribuciones benéficas de Hendrick. Más allá de los ingresos de la subasta, él donó personalmente $2 millones a los esfuerzos de ayuda para el huracán Helene en 2024. Sin embargo, la naturaleza repetitiva de sus compras de Corvettes ha suscitado preguntas sobre si sus actos bien intencionados están perdiendo su chispa entre los aficionados.
Aun así, la pasión duradera de Hendrick por los automóviles—especialmente los Corvettes—lo mantiene en el corazón de la cultura del automovilismo estadounidense. Ya sea que los aficionados se cansen de la tradición o no, el compromiso de Hendrick tanto con su colección como con la filantropía no muestra signos de desaceleración. Después de todo, para Rick Hendrick, no se trata solo de los automóviles, sino del legado que representan.