El mundo de NASCAR está a punto de experimentar cambios significativos mientras el organismo regulador renueva las reglas, con el objetivo de asegurar una competencia justa y segura. Específicamente, los cambios están dirigidos a los conductores de las series Xfinity y Truck, añadiendo un nuevo giro a la disciplina del automovilismo, conocida por permitir cierto contacto entre los corredores en la pista.
A medida que comienza la temporada 2025, estas actualizaciones al reglamento prometen transformar la forma en que los conductores compiten. Aunque el impacto total de los cambios aún está por verse, está claro que NASCAR está tomando medidas deliberadas para refinar la integridad del deporte.
Entre los numerosos cambios que NASCAR ha introducido recientemente, uno que destaca implica una redefinición de las reglas sobre ‘bloqueo de parachoques’, un elemento debatido durante mucho tiempo en las carreras. Esta enmienda en particular presenta un cambio sutil pero significativo en el lenguaje. Como destacó Jonathan Fjeld, copropietario de The Racing Experts, en un tuit, el reglamento ahora establece que los conductores «pueden» en lugar de «serían» penalizados por bloquear parachoques. Este cambio de una sola palabra es significativo, ya que indica que las penalizaciones se aplicarán a discreción de NASCAR, según las circunstancias y la naturaleza del contacto en cada caso.
El bloqueo de parachoques, o ‘bump drafting’, se refiere a un conductor que hace contacto con la parte trasera de otro vehículo utilizando su parachoques delantero. Esta táctica, a menudo empleada en pistas de superspeedway como Daytona y Talladega, permite a ambos conductores ganar velocidad. Sin embargo, conlleva riesgos sustanciales, ya que el contacto a alta velocidad puede llevar a los conductores a perder el control y causar accidentes de múltiples vehículos. Las implicaciones estratégicas de este cambio de regla para la temporada 2025 serán interesantes de observar.
Anteriormente, a pesar de que el reglamento decía que los conductores «serían penalizados» por bloquear parachoques, la aplicación era inconsistente, creando ambigüedad. El lenguaje revisado tiene como objetivo eliminar esta incertidumbre. Sin embargo, si los conductores arriesgarán penalizaciones al continuar bloqueando parachoques en las próximas carreras, aún está por verse.
La temporada 2025 ya ha visto la implementación de las reglas actualizadas de la Política de Vehículos Dañados (DVP), comenzando con el Daytona 500. En un incidente que involucró a Kyle Busch, se pusieron a prueba las reglas revisadas cuando se vio obligado a retirarse en la vuelta 186 tras un accidente. A pesar de tener cuatro llantas desinfladas, Busch intentó regresar a la pista después de las reparaciones, pero tuvo que retirarse debido a las regulaciones que limitan los intentos de regresar a la pista después de hacer arreglos en el garaje.
Anteriormente, un coche que entraba en el área del garaje era automáticamente eliminado de la carrera. Sin embargo, bajo la nueva DVP, los conductores tienen tiempo ilimitado para hacer reparaciones en el garaje, pero deben asegurarse de que su coche esté a la velocidad adecuada para evitar un estado de No Terminado (DNF).
Las nuevas reglas no han estado exentas de controversia, con Busch cuestionando la comprensión de NASCAR sobre sus propias reglas. Si estos cambios resultarán beneficiosos a largo plazo es incierto. Lo que está claro, sin embargo, es que NASCAR está apretando su control sobre los conductores y equipos, esforzándose por mantener la integridad del deporte mientras asegura que las carreras sean justas y emocionantes para todos.