En 2020 y 2021, el Autódromo Internacional do Algarve fue una de las soluciones de recurso de la Fórmula 1 para los calendarios afectados por la pandemia, lo que permitió un regreso esporádico del Gran Premio de Portugal. Sin embargo, a partir de la normalización en 2022, la ronda portuguesa no volvió a tener lugar.
Con muchos países queriendo recibir la categoría reina, algunos de ellos presentando proyectos millonarios, conseguir un lugar en un calendario cada vez más congestionado es difícil. Especialmente no teniendo los argumentos monetarios para rivalizar con algunas iniciativas, especialmente en el Medio Oriente, pero no solo.
Paulo Pinheiro, director ejecutivo del circuito de Portimão, fue cuestionado por el periódico Record sobre si el sueño de la F1 sigue siendo posible. En su respuesta, el dirigente admitió que la tarea no es fácil:
– Soñar es siempre lo que nos mueve […]. Ya hemos recibido el campeonato en dos ocasiones y estaremos preparados para que eso vuelva a suceder, pero muchos factores externos al Autódromo Internacional do Algarve tienen que conjugarse en el momento adecuado para que el regreso sea una realidad’.
Los apoyos financieros, no solo de privados, sino también del Estado, son esenciales para sostener un Gran Premio de F1, y Portugal está lejos de ser uno de los países más adinerados. Paulo Pinheiro destacó que el circuito algarvio ‘es uno de los desafíos más exigentes desde el punto de vista técnico y humano’. Sin embargo, subrayó: ‘Recibir una prueba no depende solo de nosotros, ¡si así fuera… sería mañana mismo!’.
A pesar de no estar en el calendario, el Autódromo do Algarve recibe a veces pruebas privadas de equipos – con monoplazas de años anteriores, como lo exigen las reglas. Y, en el pasado mes de diciembre, el tricampeón del mundo Max Verstappen estuvo en el circuito probando algunos coches de GT.