El programa del Sistema de Intercambio de Volvo Cars, destinado a reutilizar piezas de Volvo, logró una reducción de 5,000 toneladas en 2023, que incluye 553 toneladas de materias primas (265 toneladas de acero y 145 toneladas de aluminio) y 4,508 toneladas en emisiones de dióxido de carbono asociadas con la energía ahorrada.
Según Volvo, al restaurar componentes genuinos, la marca está limitando su impacto ambiental no solo en términos de energía consumida, sino también ahorrando en las materias primas utilizadas.
Con el Sistema de Intercambio de Volvo Cars, cada pieza desgastada pasa por una meticulosa restauración, volviendo a las especificaciones de fábrica, lo que permite ahorros de hasta el 85% en materias primas y un 80% en energía en comparación con la producción de piezas nuevas.
Este proceso, que va mucho más allá del reciclaje convencional, asegura que los vehículos Volvo se beneficien de piezas que cumplen con los mismos rigurosos estándares de calidad que las originales, una garantía que se extiende a modelos de hasta 15 años de antigüedad. Además, es una solución sostenible y confiable, donde las piezas restauradas se actualizan con las últimas especificaciones, superando potencialmente el rendimiento inicial.
Volvo Cars está llevando este programa único aún más lejos al diseñar sus piezas con la futura desmontabilidad en mente, colaborando con el departamento de Diseño para simplificar el proceso futuro y asegurar que la reutilización sea lo más efectiva posible. Este enfoque permite que el programa se adapte continuamente a las demandas ambientales y de calidad, al mismo tiempo que contribuye a la visión de una industria automotriz más sostenible e innovadora.