Ferrari está acelerando su poder estelar para el Gran Premio de Las Vegas, anunciando una colaboración de alto octanaje con el gigante de Hollywood Paramount Pictures. Esta asociación innovadora promete añadir un toque cinematográfico a la final de la temporada de Fórmula 1 en EE. UU., subrayando cuán poderosa se ha vuelto la expansión de la F1 en América para los acuerdos de marca y los mega patrocinios.
Las leyendas de las carreras italianas se unirán a Paramount Pictures, cuyo reciente anuncio de Gladiator II ha hecho que fans y críticos estén entusiasmados. Las estrellas de Ferrari, Charles Leclerc y Carlos Sainz, están listos para representar a la Scuderia en el estreno en Londres de Gladiator II, vestidos con esmoquin a medida diseñados por el director creativo de Ferrari. Mientras tanto, de regreso en los Estados Unidos, los coches de Ferrari llevarán una decoración especial de Gladiator II en el GP de Las Vegas, añadiendo un toque extra de Hollywood al fin de semana de carreras.
El mercado estadounidense se ha convertido en un jugador importante en la Fórmula 1, atrayendo inversiones significativas e interés de marcas. Esta colaboración entre Ferrari y Paramount promete ir aún más lejos, con contenido exclusivo que mostrará la asociación Ferrari-Paramount a través de pantallas digitales y canales de televisión, ofreciendo a los fans una experiencia única que combina la emoción del automovilismo con el atractivo de la pantalla grande.
Paramount Pictures expresó su entusiasmo por la asociación, diciendo: “Solo tenía sentido unirnos a la marca más icónica y llena de adrenalina en los deportes de motor. Junto con Ferrari, estamos creando una experiencia de entretenimiento única que destaca nuestro legado compartido de excelencia e innovación.”
Desde su carrera inaugural la temporada pasada, el GP de Las Vegas ha sido un espectáculo, trayendo tanto ganancias financieras como compromiso global de los fanáticos al deporte. Ahora, con Ferrari y Paramount uniendo fuerzas, la próxima carrera promete una experiencia de taquilla, dejando a los fanáticos con una pregunta: ¿No están entretenidos?