En un giro impactante de los acontecimientos en el Coca-Cola 600, William Byron ha acusado públicamente a Joey Logano de ayudar a Ross Chastain a robarle la victoria. El piloto de Hendrick Motorsports lideró impresionantes 283 vueltas, pero quedó atónito cuando Chastain, de Trackhouse Racing, se lanzó para reclamar la victoria.
Byron, quien comenzó la carrera en tercer lugar, luchó arduamente en medio de múltiples banderas amarillas y cambios de líder. Sin embargo, fueron las maniobras cuestionables de Logano en las Curvas 3 y 4 las que Byron cree que permitieron a Chastain alcanzar y, en última instancia, arrebatarle la victoria.
A pesar de salvar un segundo lugar, Byron no pudo ocultar su frustración por las acciones de Logano, que sintió que impactaron directamente el resultado de la carrera. Por otro lado, el camino de Chastain hacia la victoria fue nada menos que notable, comenzando desde la parte trasera del grupo debido a un choque en la práctica.
Las paradas estratégicas en pits de Chastain y una actuación audaz en la pista lo llevaron a emerger victorioso, reclamando su primera victoria de la temporada y su sexta victoria en la Copa en general. El emotivo tributo post-carrera del nativo de Florida a los héroes caídos en el Día de los Caídos solo añadió intensidad al momento.
Con esta victoria inesperada, Chastain ha asegurado ahora el octavo lugar en la clasificación de la Copa, mientras que Byron continúa liderando a pesar de la desgarradora pérdida en el Charlotte Motor Speedway. La batalla entre estos pilotos está lejos de haber terminado, prometiendo más carreras emocionantes y feroz competencia en las próximas carreras.