SE FILTRAN SECRETOS DE CONFIGURACIÓN EN ROVAL: NASCAR SE PREPARA PARA UNA INVESTIGACIÓN
NASCAR no es ajeno a controversias detrás de escena, y el último escándalo tiene al mundo de las carreras en plena efervescencia. Durante la reciente carrera en el Charlotte Roval, los oficiales revelaron que estaban al tanto de que información de configuración se compartía secretamente entre dos equipos, un acto que infringe directamente las estrictas regulaciones del deporte. Esta última revelación ha enviado ondas de choque a través de la sede de NASCAR, reavivando las preocupaciones sobre la equidad en el deporte.
Según informes, un equipo, que no tiene pilotos en los Playoffs de la NASCAR Cup Series 2024, supuestamente sobornó a un ingeniero de un equipo rival para obtener acceso a información sensible de configuración. Si bien los oficiales han reconocido que estaban al tanto de la situación, no se ha presentado ninguna queja formal, lo que permite que la transferencia ilegal de datos continúe sin consecuencias inmediatas.
Se informa que el ingeniero involucrado está buscando una nueva oportunidad, ya que su contrato con su equipo actual está programado para expirar al final de la temporada 2024. Esta capa adicional de intriga solo ha alimentado la especulación sobre qué equipos estaban involucrados en la violación.
LA HISTORIA DE NASCAR CON ESCÁNDALOS
A lo largo de los años, NASCAR ha endurecido sus regulaciones tras numerosas controversias, asegurando que los equipos operen dentro de las reglas del deporte. Si bien la mayoría de los escándalos han involucrado modificaciones en los coches, este nuevo escándalo se centra en el intercambio de datos de configuración, que podría proporcionar a los equipos una ventaja competitiva. No es la primera vez que el automovilismo ha visto un incidente así; los aficionados rápidamente hicieron comparaciones con la controversia de RLL IndyCar, donde dos equipos fueron penalizados por intercambiar datos de presión de neumáticos.
LA ESPECULACIÓN DE LOS AFICIONADOS ESTÁ DESCONTROLADA: ¿QUIÉN TIENE LA CULPA?
Sin una investigación formal en curso, los aficionados de NASCAR han quedado a especular qué equipos están involucrados. Entre los nombres que se mencionan, Legacy Motor Club (LMC) y Richard Childress Racing (RCR) han sido objeto de escrutinio por parte de los aficionados. Las redes sociales han estado llenas de teorías, con muchos aficionados creyendo que LMC podría ser el culpable, mientras que otros apuntan a RCR por su repentino aumento en el rendimiento.
“Mi apuesta es por RCR. Pasaron de ser completamente no competitivos a ganar en 2 semanas. Vamos. Es obvio,” comentó un aficionado en línea.
«Tenía que ser LMC, ¿verdad? 2311 probablemente ya recibe las notas de configuración,» especuló otro aficionado, refiriéndose a la asociación del equipo con 2311 Racing.
Los aficionados están trazando paralelismos claros entre este incidente y el escándalo de presión de neumáticos de RLL en IndyCar, señalando cómo las violaciones relacionadas con la configuración pueden escalar rápidamente en sanciones significativas si se informan oficialmente.
AÚN NO HAY ACCIÓN FORMAL, ¿PERO PROBLEMAS EN PUERTA PARA LOS EQUIPOS?
Aunque NASCAR aún no ha lanzado una investigación oficial—debido a la ausencia de una queja formal—el escándalo ha suscitado serias preocupaciones sobre la integridad de los actuales Playoffs de la Copa 2024. Si la situación se intensifica, podría llevar a consecuencias significativas para los equipos involucrados, incluyendo posibles sanciones y descalificaciones.
Mientras tanto, la acción de los playoffs continúa mientras NASCAR se dirige a Las Vegas para la Ronda de 8. Con la temporada llegando a su fin, las apuestas son más altas que nunca. Si un campeón repetido emergerá o si un nuevo nombre se añadirá al ilustre rollo de honor de NASCAR sigue siendo una incógnita. Sin embargo, este escándalo en desarrollo amenaza con eclipsar la emocionante conclusión del deporte, ya que las próximas cuatro carreras determinarán quién se lleva el campeonato de la Copa Series 2024.
Por ahora, todas las miradas están puestas en los oficiales de NASCAR para ver cómo manejarán esta última controversia, y si se llevará a cabo una investigación completa en las próximas semanas.