La temporada de NASCAR 2025 está a punto de comenzar con un cambio de regla significativo destinado a abordar una de las políticas más controvertidas en los últimos años: la Política de Vehículos Dañados (DVP). Introducida en 2017 para agilizar la gestión de las carreras, la DVP enfrentó críticas intensas después de varios incidentes de alto perfil en 2024, incluyendo un choque de 28 autos en Talladega que terminó con la carrera de Chase Elliott. Ahora, NASCAR ha actualizado la regla, ganando elogios de conductores, equipos y aficionados por igual.
¿Qué hay de nuevo con la DVP?
Bajo la DVP anterior, los equipos tenían solo siete minutos en la zona de pits para reparar vehículos dañados. Si las reparaciones requerían un viaje al garaje, el auto era automáticamente descalificado de la carrera, lo que generaba frustración en los conductores y equipos que sentían que eran apartados injustamente.
La actualización de 2025 introduce un cambio importante: los equipos ahora pueden reparar sus autos en el garaje sin ser descalificados, aunque el temporizador de siete minutos aún se aplica a las reparaciones en la zona de pits. Este cambio permite que los equipos regresen a la carrera después de completar las reparaciones en el garaje, dándoles la oportunidad de luchar para volver al pelotón.
Chase Elliott y Ryan Blaney: Catalizadores del Cambio
El cambio de regla llega como una respuesta directa a incidentes que generaron críticas generalizadas, incluido el famoso DNF de Chase Elliott en Talladega. Atrapado en un choque de 28 autos, Elliott sufrió un neumático desinflado y fue remolcado al garaje, terminando su carrera debido a las antiguas restricciones de DVP. Frustrado, Elliott expresó su descontento:
“Es desafortunado que si tienes neumáticos desinflados, eso te impida ir a cualquier parte sin ayuda… Estás a merced de los trabajadores de la pista en ese momento.”
Elliott no estaba solo en su crítica. Durante la carrera de playoffs de Watkins Glen 2024, Ryan Blaney también fue forzado a abandonar tras sufrir daños en la primera parte de la carrera. Blaney, el campeón de la Serie Cup 2023, criticó la regla:
“Dénnos una oportunidad para arreglarlo. ¿Cómo van a dictar si hemos terminado o no?”
Sus voces, combinadas con la creciente frustración en todo el paddock, llevaron a NASCAR a reevaluar la política.
Reacciones de los Equipos: Un Cambio Bienvenido
El DVP actualizado ha sido bien recibido por los equipos y jefes de equipo, quienes lo ven como un paso hacia una competencia más justa. El insider de NASCAR, Jordan Bianchi, compartió sus opiniones en The Teardown Podcast, afirmando:
“Esto se siente mucho más directo… A los equipos les gusta que no tengan que traer tarjetas de choque tanto.”
Permitir que los equipos reparen vehículos en el garaje no solo reduce el desperdicio, sino que también asegura que las carreras no se decidan prematuramente por tecnicismos.
¿Una Nueva Era de Regresos?
El cambio de regla abre la puerta a emocionantes regresos. Los pilotos que enfrentan contratiempos tempranos ahora tienen una oportunidad de luchar para regresar a la carrera, navegar por el campo y desafiar por puntos o incluso la victoria. Para Chase Elliott, que ha sido acosado por la mala suerte, esta regla podría proporcionar el respiro que desesperadamente necesita.
Jordan Bianchi expresó optimismo sobre el impacto en la competencia:
“Esto permitirá a los equipos hacer un regreso a la carrera y necesitarán navegar por el campo para adelantar y igualar los tiempos de vuelta de otros pilotos.”
¿Qué Sigue para NASCAR?
La actualización del DVP es solo uno de varios cambios que NASCAR ha introducido antes de la temporada 2025. Si bien los detalles sobre ajustes adicionales permanecen en secreto, el enfoque es claro: mejorar la competencia, aumentar la equidad y abordar los comentarios de los conductores y equipos.
Mirando hacia adelante: ¿nivelará el nuevo DVP el campo de juego?
Para conductores como Chase Elliott y Ryan Blaney, el DVP revisado podría ser un cambio decisivo, permitiéndoles capitalizar su habilidad y resiliencia en lugar de ser marginados por reglas rígidas. Con las 500 Millas de Daytona a la vista, todas las miradas estarán puestas en cómo se desarrolla la política actualizada en el escenario más grande de NASCAR.
La temporada 2025 promete nuevas oportunidades, optimismo renovado y una oportunidad de redención para los conductores que han sentido el dolor de la mala suerte y políticas restrictivas. ¿Finalmente tendrá Elliott un respiro, o los dioses de las carreras tendrán otros planes? Solo el tiempo lo dirá.