El piloto de Front Row Motorsports, Michael McDowell, no se está quedando callado ante las críticas. Después de que Toyota’s 23XI Racing y Ford’s Front Row Motorsports presentaran una demanda contra NASCAR, alegando prácticas monopolísticas en el acuerdo de charter 2025-2031, la comunidad de NASCAR se dividió. Entre los críticos más vocales estaba el ex-jefe de equipo Larry McReynolds, quien lanzó un duro ataque a FRM, etiquetándolos como “no competitivos.” Este comentario no le sentó bien a McDowell.
McDowell, que ha estado tratando de mantenerse al margen de la controversia, no pudo ignorar las palabras de McReynolds. A pesar de querer evitar el drama, especialmente con su traslado a Spire Motorsports el próximo año, el comentario le afectó demasiado.
«Sabes, honestamente, traté de mantenerme fuera del ruido tanto como pude esta semana. Porque, obviamente, me estoy mudando el próximo año [a Spire]. No quiero ser un daño colateral en todo esto,» admitió McDowell. Pero no iba a dejar que el comentario de McReynolds pasara sin respuesta.
McDowell encontró la desestimación de su equipo por parte de McReynolds como no competitivo tanto ofensiva como injusta. «Una de las cosas que no me gustó fue simplemente la opinión de Larry Mac sobre nosotros siendo el equipo ‘no competitivo’ y por qué tendríamos algo en juego o decirlo. Y eso es algo que me ofendió porque siento que somos bastante competitivos,» respondió.
Destacó el sólido desempeño de FRM, especialmente en superspeedways, recordando a los críticos que su equipo aseguró su sexta pole en Talladega—un claro indicador de su capacidad en la pista. «Esta es nuestra sexta pole, sí, no hemos llegado a la victoria este año, pero hemos estado muy cerca. Estoy realmente orgulloso de todos en Front Row y de lo competitivos que somos,» dijo, enfatizando los esfuerzos y logros del equipo.
McDowell admitió que habría ignorado el ruido alrededor de la demanda si no hubiera sido por el «bajo golpe» de McReynolds sobre su competitividad. «Esa fue probablemente la única puñalada que me dolió profundamente y dolió a mis chicos, pero ya sabes, hay mucho ruido y tratamos de ignorarlo. Pero esa fue un bajo golpe.»
La respuesta del piloto veterano destaca el orgullo y el esfuerzo que él y su equipo ponen en cada carrera, exigiendo respeto por su desempeño en la pista. Los comentarios de McDowell envían un mensaje claro: los equipos pequeños como Front Row Motorsports tienen derecho a ser escuchados, y no deberían ser desestimados como meros rellenos en la parrilla.
Ahora, la pelota está en la cancha de McReynolds—¿cómo responderá el legendario jefe de equipo a esta crítica directa? El mundo de NASCAR estará atento.