La penalización de Lando Norris por pasar a alta velocidad bajo banderas amarillas en el Gran Premio de Qatar ha dejado frustrado a McLaren, señalando a la FIA por lo que consideran un castigo desproporcionado y una arbitraje indeciso. La costosa penalización jugó un papel crucial en negar a McLaren el Campeonato de Constructores 2024, mientras el equipo ahora centra su atención en un emocionante final de temporada en Abu Dhabi.
El Incidente: Una Decisión Costosa
La controversia se desató en la vuelta 30 cuando el Control de Carrera desplegó brevemente banderas amarillas de doble ondeo por un espejo retrovisor desviado que quedó fuera de la línea de carrera en el Circuito Internacional de Losail. Mientras Norris perseguía al líder de la carrera, Max Verstappen, no logró reducir la velocidad ante las banderas amarillas, mientras Verstappen se retiraba, lo que llevó a la penalización.
La decisión de la FIA de imponer una penalización de drive-through—un castigo severo—hizo que Norris bajara del segundo lugar al último. A pesar de una recuperación enérgica para terminar en décimo lugar y reclamar la vuelta más rápida, el daño a las aspiraciones de título de McLaren ya estaba hecho.
Andrea Stella: «Faltaba Contexto y Proporcionalidad»
El director del equipo McLaren, Andrea Stella, no se anduvo con rodeos al criticar la gestión de la situación por parte de la FIA, pidiendo un mayor contexto y proporcionalidad en la aplicación de las penalizaciones.
“En la aplicación de la penalización, creo que hemos perdido cualquier sentido de proporción y cualquier sentido de especificidad,” dijo Stella a Sky Sports F1. “¿Podemos mirar específicamente la infracción, el nivel de peligro asociado con la situación, y de hecho, la bandera amarilla fue retirada?”
Stella argumentó que la sanción a Norris fue excesivamente dura dadas las circunstancias. Señaló que los escombros estaban fuera de la línea de carrera y no había comisarios ni personal en la pista en ese momento.
“En lugar de echar un vistazo a cualquier tipo de libro de reglas, probablemente cubierto de polvo encima, y luego aplicarlo sin ningún sentido de enfoque crítico, hay una oportunidad para hacerlo mejor por parte de la FIA,” dijo Stella.
La Indecisión de la FIA Bajo Fuego
Sumando a la frustración de McLaren estaba la aparente falta de claridad de la FIA en la gestión de la situación. El Director de Carrera Rui Marques dudó entre desplegar un coche de seguridad virtual o completo y, en última instancia, retrasó la toma de decisiones. Esta indecisión solo escaló el caos cuando dos coches más sufrieron pinchazos debido a los escombros.
“Creo que es bastante peculiar que se desplegara la bandera amarilla y luego se retirara, pero en realidad, la situación en ese sector era la misma,” dijo Stella. “Había escombros en la pista, pero a veces merecía una bandera amarilla, y unos segundos después, no, lo cual es simplemente desafortunado.”
Las Consecuencias: Un Título Decidido en Abu Dhabi
La penalización de Norris y la posterior pérdida de puntos valiosos significan que McLaren llega a la última carrera de la temporada con una ventaja más delgada de lo esperado de 21 puntos sobre Ferrari. Aunque McLaren aún controla su destino, el GP de Qatar fue una gran oportunidad perdida para sellar el título.
“Hasta el final,” tuiteó McLaren después de la carrera. “¡La batalla por el Campeonato de Constructores se decidirá en Abu Dhabi!”
Conclusión: ¿Una Lección Crucial para la FIA?
El GP de Qatar ha reavivado los debates sobre la consistencia y proporcionalidad de la FIA en las decisiones de penalización. Para McLaren, el enfoque ahora se desplaza a Abu Dhabi, donde el Campeonato de Constructores está en juego. Para la FIA, el incidente subraya la necesidad de protocolos más claros y de una toma de decisiones para evitar controversias similares en el futuro.