Max Verstappen respondió directamente cuando se le preguntó sobre la investigación en curso sobre el presunto comportamiento inapropiado de Christian Horner. El Director del Equipo de Red Bull Racing está actualmente bajo escrutinio por estas acusaciones y ha sido interrogado extensamente por un abogado externo. A pesar de esto, Horner continúa desempeñando su papel como jefe de equipo en Milton Keynes. Verstappen, sin embargo, afirmó que la investigación no ha tenido impacto en él y que su único enfoque es conducir el auto RB20 en Bahrein. Expresó la esperanza de una pronta resolución del caso.
Hubo informes anteriores que sugerían que el padre de Max Verstappen, Jos Verstappen, había tenido un desacuerdo con Horner sobre este asunto. Sin embargo, el propio Horner negó estos rumores, afirmando que los negocios en Milton Keynes continúan normalmente a pesar de la investigación en curso. Se dice que el apoyo del copropietario mayoritario de Red Bull, Chaleo Yoovidhya, está detrás de Horner. Sin embargo, el futuro del Director del Equipo Británico permanece incierto hasta que se publique el veredicto oficial por parte de Red Bull GmbH.
El caso contra Horner ha sido remitido a la sede de Red Bull en Austria y se espera una decisión pronto, posiblemente durante el Gran Premio de Bahrein. Daniel Ricciardo recientemente pidió un proceso transparente y rápido para la investigación sobre Horner. Es importante destacar que Horner ha negado enérgicamente todas las acusaciones hasta el momento. Supuestamente, intentó resolver el caso con la empleada en cuestión por $800,000, pero ella se negó y podría llevar el asunto a los tribunales.
Hasta que se pruebe su culpabilidad, se presume que Christian Horner es inocente. Sin embargo, si se le considera culpable, esto tendrá consecuencias significativas para Red Bull y para la comunidad de la Fórmula 1. Se deberían implementar medidas más estrictas para garantizar un entorno de trabajo seguro en la cima del automovilismo. Los fanáticos esperan ansiosamente el veredicto oficial.