Max Verstappen revela las alegrías y desafíos de la paternidad en una entrevista exclusiva
En una entrevista rara y sincera, el cuatro veces campeón de Fórmula 1 Max Verstappen se abre sobre la emocionante travesía de la paternidad, brindando a los fanáticos una mirada íntima a su vida más allá de la pista de carreras. La sensación del automovilismo holandés compartió estas percepciones personales durante una animada charla con el especialista en acrobacias Riley Harper, filmada contra el vibrante telón de fondo de Austin, Texas, durante el fin de semana del Gran Premio de Estados Unidos.
Verstappen, quien recientemente se convirtió en padre por segunda vez, describe su nuevo papel con palpable entusiasmo. «Hoy es un poco más largo entonces, pero prefiero eso ahora. También con la pequeña en casa. Tiene como cinco meses y medio,» reveló, enfatizando la importancia de atesorar cada momento con su familia en crecimiento. Sus reflexiones revelan a un papá amoroso que valora el tiempo pasado en casa, especialmente sabiendo que estará fuera durante dos semanas compitiendo.
La conversación tomó un giro encantador cuando ambos hombres conectaron a través de sus experiencias compartidas como ‘papás de niñas.’ Verstappen no pudo ocultar su alegría al decir: «Sí, ha sido realmente bueno hasta ahora. Lo he estado disfrutando mucho, mucho.» Esta proclamación irradia la calidez de un hombre profundamente involucrado en la vida de su familia, destacando el lado más suave del feroz competidor.
Desde que comenzó su relación con su pareja Kelly Piquet en 2020, la vida de Verstappen ha florecido con la llegada de su hija, Lily, nacida en abril de 2025. Pero eso no es todo: también abraza su papel como «padre adicional» de la hija de Piquet, Penelope, de seis años. «Mi novia ya tenía una niña», explicó, mostrando su dedicación a ser una figura paterna positiva en la vida de Penelope. Habiéndola conocido desde que tenía solo un año, admite: «Así que para mí fue casi, no un shock, ¿sabes?»
A medida que la conversación se profundizaba, Verstappen compartió de manera sincera las matices emocionales de la paternidad, particularmente los momentos agridulces de dejar el hogar. «Cerrar la puerta ahora, y luego irme, es un poco diferente. Y volver a casa [es la mejor parte]», expresó, subrayando la profunda conexión que siente con sus hijas.
En un giro conmovedor, Verstappen reveló que la pequeña Lily ya está haciendo progresos en su desarrollo, señalando: «Casi está sentada también.» Con un brillo en sus ojos, compartió cómo ha comenzado «a reír, a reaccionar y a agarrar cosas», un testimonio de las alegrías de ver crecer a su hija.
Este vistazo exclusivo a la vida de Verstappen como padre no solo humaniza al ícono de las carreras, sino que también resuena con los fanáticos que lo ven como más que un simple competidor en la pista. Mientras equilibra las exigencias de las carreras a alta velocidad con las tiernas responsabilidades de la paternidad, Verstappen demuestra que incluso los campeones pueden abrazar el hermoso caos de la vida familiar.
Con su familia a la vanguardia, Verstappen sigue inspirando no solo con sus habilidades de conducción, sino también con su sincero compromiso de ser un padre dedicado. Este vistazo a su vida es un recordatorio de que detrás del casco y la velocidad, hay un padre amoroso navegando la emocionante aventura de la paternidad.









