La intersección de la Fórmula 1 y NASCAR, dos gigantes del automovilismo, ha intrigado durante mucho tiempo a los aficionados, con muchos preguntándose si la Fórmula 1 podría adoptar algunos de los elementos característicos de NASCAR, como las carreras en óvalo. Sin embargo, el actual campeón mundial de Fórmula 1 en tres ocasiones, Max Verstappen, ha expresado inequívocamente su oposición a la idea, poniendo fin a cualquier especulación sobre la inclusión de óvalos en el calendario de F1.
Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de que la Fórmula 1 incorporara circuitos en óvalo, Verstappen no se anduvo con rodeos. Su respuesta fue tan contundente como su conducción:
“¿En un calendario de F1? No, no, no para mí. Me gusta hacerlo por diversión, en línea, pero no en la vida real. IndyCar, NASCAR—me gusta verlas, pero no conducirlas yo mismo.”
La postura de Verstappen refleja su preferencia por la complejidad técnica y los diversos desafíos que ofrecen los circuitos tradicionales de Fórmula 1. Si bien el neerlandés reconoció disfrutar de los circuitos en óvalo en simuladores y carreras en línea, trazó firmemente la línea en la competencia en la vida real.
Una clara división entre NASCAR y F1
El debate sobre la mezcla de elementos de NASCAR y Fórmula 1 ha ganado impulso en los últimos años, especialmente a medida que Liberty Media—el grupo propietario estadounidense de F1—intenta expandir la popularidad del deporte en los Estados Unidos. NASCAR, con su atractivo local y sus intensas carreras en óvalo, cuenta con una base de aficionados dedicada, particularmente en América del Norte, mientras que la Fórmula 1 continúa creciendo su audiencia a nivel global.
A pesar de sus formatos diferentes, la idea de fusionar aspectos de los dos deportes ha tantalizado a algunos aficionados. Sin embargo, Verstappen ve las dos disciplinas como inherentemente diferentes. Sus comentarios surgieron en medio de las discusiones en curso que comparan su dominio en la Fórmula 1 con los campeones de NASCAR, una comparación que desestimó respetuosamente:
“Ambos pilotos son buenos en sus respectivos deportes,” dijo Verstappen, eligiendo evitar una comparación directa.
Un Reconocimiento a las Rápidas Curvas de Mugello
Aunque Verstappen vetó las carreras en óvalos, defendió un circuito diferente: Mugello. La pista italiana, conocida por sus curvas rápidas y fluidas, albergó una carrera de F1 durante la interrumpida temporada de 2020 y dejó una impresión duradera en el as de Red Bull.
“Mugello. Curvas rápidas. Solo pistas fluidas. Así que no demasiadas secciones de baja velocidad, de parar y arrancar, solo curvas rápidas y fluidas,” dijo Verstappen, destacando su preferencia por pistas con un ritmo que pone a prueba la habilidad del piloto y el rendimiento del coche.
El llamado del neerlandés por más circuitos de alta velocidad y fluidos subraya su pasión por pistas que desafían los límites tanto del piloto como de la máquina, en lugar de las vueltas repetitivas de las carreras en óvalos.
La Expansión Americana de la F1 Sin Óvalos
El auge de la popularidad de la Fórmula 1 en los Estados Unidos—impulsado por Drive to Survive de Netflix y la adición de carreras de alto perfil como el Gran Premio de Miami y Las Vegas—ha generado conversaciones sobre una mayor americanización del deporte. Sin embargo, como sugieren los comentarios de Verstappen, un movimiento hacia circuitos ovales es poco probable.
Mientras NASCAR prospera con su atractivo exclusivamente americano y sus emocionantes pistas ovales, la identidad de la Fórmula 1 radica en su diversidad de circuitos, desde pistas urbanas como Mónaco hasta lugares históricos como Silverstone. La logística y las demandas técnicas de las carreras en ovalo también representarían desafíos para los coches de F1, diseñados para trazados complejos y de múltiples curvas.
El Veredicto
El contundente rechazo de Max Verstappen a los óvalos en el calendario de F1 reafirma el compromiso del deporte con sus raíces. Mientras NASCAR y la Fórmula 1 continúan cautivando a millones con sus estilos distintos, el actual campeón de F1 dejó claro: no está dispuesto a intercambiar las complejidades de Suzuka, Spa o Monza por los altos bancos de Daytona o Talladega.
A medida que la presencia de la Fórmula 1 en América crece, la preferencia de Verstappen por circuitos fluidos y técnicos como Mugello ofrece un mapa para preservar la identidad del deporte mientras se exploran nuevas fronteras. Por ahora, parece que los aficionados de F1 pueden disfrutar de los óvalos desde las gradas—o el simulador—en lugar de como un elemento básico del calendario de Grand Prix.