Más carga, más energía consumida, más usuarios: en octubre, según la Red Nacional de Carga (RNC), la fuerte tasa de crecimiento de la movilidad eléctrica en Portugal continuó, con más de 783,000 operaciones de carga registradas en la red pública, lo que representa un aumento del 39% en comparación con el mismo mes de 2024. Estas cargas fueron realizadas por alrededor de 130,000 usuarios, un crecimiento del 46%, también en comparación con el mismo período del año pasado, que consumieron 17.5 GWh de electricidad (+47%).
En los primeros 10 meses del año, la RNC registró más de 7.2 millones de operaciones de carga, lo que representó el suministro de más de 162,000 MWh de energía, con aumentos del 47% y 60%, respectivamente, en comparación con el mismo período de 2024. El número de usuarios se acerca cada vez más a 400,000, habiendo superado la «barrera» de 390,000 en octubre (en este punto, el crecimiento es del 58%).
La infraestructura pública también está aumentando muy rápidamente, pero a un ritmo más lento del deseado, como ocurre en toda Europa. A finales de octubre, la RNC contaba con 7,072 estaciones de carga en todo el territorio nacional, lo que representaba alrededor de 13,250 puntos de carga de baterías, de los cuales 2,689 eran de carga rápida o ultra-rápida. Así, al aumentar la cobertura, se mejora la accesibilidad y la eficiencia de la red.
Según la misma fuente, el impacto ambiental del aumento significativo en la demanda de movilidad eléctrica es muy positivo. Solo durante octubre, el uso de la RNC eliminó la emisión de más de 14,000 toneladas de CO2; y, desde enero, ahorró el consumo de más de 48 millones de litros de diésel.
Actualmente, Portugal tiene un promedio de 124 puntos de carga para baterías de vehículos eléctricos por cada 100 km de carretera, y 168 puntos de carga por cada 100,000 habitantes. Esto confirma la inversión continua en el proceso de transición energética en el ámbito de la movilidad, haciéndola cada vez más accesible y verde.








