Después de un fin de semana decepcionante en el Gran Premio de Brasil, donde Lewis Hamilton terminó en 11ª posición en la carrera sprint y en 10ª en la carrera principal, comenzaron a circular rumores de que el campeón mundial siete veces podría separarse de Mercedes antes de lo esperado. Tras sus dificultades en Interlagos, Hamilton se desahogó por la radio: “Fue un desastre de fin de semana, chicos. Lo peor que ha estado el coche.”
En una declaración que hizo que muchos hablasen, Hamilton añadió: “Si esta es la última vez que puedo competir, fue una pena que no fuera genial, pero (estoy) agradecido por ustedes.” Más tarde insinuó a Sky Sports F1 que estaría contento “de irme de vacaciones” en lugar de completar las últimas tres carreras de la temporada.
A pesar de sus frustraciones, Mercedes confirmó el miércoles que Hamilton efectivamente competirá en las últimas tres carreras, que incluyen Las Vegas el 24 de noviembre, Catar el 1 de diciembre y Abu Dabi el 8 de diciembre. El descontento de Hamilton con la configuración actual del coche no es nuevo, pero sus crudas declaraciones posteriores a la carrera han alimentado la especulación sobre sus planes a largo plazo con Mercedes.
Actualmente en séptimo lugar en la clasificación de pilotos, Hamilton ha logrado dos victorias este año—en los Grandes Premios de Gran Bretaña y Bélgica. Con un total de 105 victorias en su carrera y campeonatos que abarcan desde 2008 hasta su último en 2020, Hamilton sigue siendo uno de los pilotos más condecorados de la F1. Sin embargo, con Mercedes enfrentando una batalla cuesta arriba, los comentarios de Hamilton sirven como un recordatorio de sus altas expectativas y su deseo de un coche competitivo.
Por ahora, Hamilton concluirá la temporada, pero tanto los aficionados como los analistas están atentos mientras continúan acumulándose rumores sobre posibles cambios en su carrera.