La carrera de Lance Stroll en la Fórmula 1, a pesar de abarcar 166 carreras de Gran Premio, sigue dividiendo a aficionados y expertos por igual. El canadiense de 29 años terminó la temporada 2024 en el puesto 13 de la clasificación de pilotos con 24 puntos, un marcado contraste con su compañero de Aston Martin, Fernando Alonso, quien finalizó en novena posición con 70 puntos a pesar de momentos de aparente desinterés por el coche de bajo rendimiento.
A medida que Aston Martin se prepara para un futuro más brillante bajo la guía del legendario Adrian Newey, las preguntas sobre la capacidad de Stroll para afrontar el desafío son más fuertes que nunca.
Una Carrera Estancada
La estancia de Stroll en la F1 ha estado marcada por errores no forzados, inconsistencia y una falta de progreso significativo. Mientras que el apoyo financiero a menudo allana el camino para algunos pilotos, sus actuaciones no han logrado conquistar ni a aficionados ni a críticos. La actitud del heredero multimillonario—frecuentemente descrita como indiferente—solo ha avivado las críticas.
Un periodista experimentado, que prefiere el anonimato para no poner en riesgo su acceso, resumió el sentimiento: “Lance tiene el mejor trabajo del mundo, pero nunca sonríe ni muestra gratitud por su increíble oportunidad.”
El Veredicto de Jacques Villeneuve: La Perspectiva del Campeón
El campeón del mundo de Fórmula 1 de 1997, Jacques Villeneuve, cree que las ambiciones de Aston Martin dependen de más que solo recursos financieros. Reconoció las increíbles inversiones en instalaciones, incluido un túnel de viento de última generación, pero enfatizó que el éxito requiere más que hardware.
“Adrian Newey no puede diseñar un coche solo. Necesita la opinión del piloto, la opinión del piloto adecuado, y el equipo correcto a su alrededor,” dijo Villeneuve.
Sobre las perspectivas de Stroll, Villeneuve fue pragmático. “El objetivo de Lawrence [Stroll] es que su hijo se convierta en campeón del mundo. Por eso está invirtiendo tanto dinero. ¿Puede suceder? ¿Quién sabe?”
Villeneuve también señaló la personalidad de Lance como un obstáculo. “¿Necesita Lance mejorar su imagen? Absolutamente. Ser querido genera energía del equipo y los mecánicos, lo que en última instancia te ayuda a ir más rápido. Lance necesita trabajar en ese atractivo, particularmente con los medios.”
Johnny Herbert: Una Evaluación Más Suave
El veterano comentarista de F1, Johnny Herbert, ofreció una perspectiva más indulgente, atribuyendo algunos de los errores de Stroll a la curva de aprendizaje de un deporte cada vez más desafiante.
“Todavía está aprendiendo,” comentó Herbert, algo en broma. “Algunos errores, como salirse temprano en las carreras, ocurren porque los neumáticos no están a temperatura. Los incidentes en la trampa de grava muestran lo complicado que puede ser: sin impulso, es como arenas movedizas.”
Herbert también señaló la mejor competitividad de Stroll contra Alonso en la segunda mitad de la temporada, sugiriendo que Stroll podría prosperar si Aston Martin entrega un coche ganador de carreras bajo la dirección de Newey.
“La presión está fuera de él por ahora,” concluyó Herbert.
Las Ambiciones de Aston Martin vs. las Limitaciones de Stroll
Bajo la propiedad de Lawrence Stroll, Aston Martin ha dejado claro que el objetivo es nada menos que la contienda por el campeonato mundial. Sin embargo, la disparidad evidente entre las aspiraciones del equipo por el título y las actuaciones de Lance Stroll se ha convertido en un paradoja.
Mientras el equipo construye un futuro competitivo alrededor de la experiencia de Adrian Newey, la pregunta de si Lance puede transformarse en un piloto de clase mundial sigue sin resolverse. Para su padre, el sueño de ver a Lance coronado campeón es tanto una misión personal como profesional, pero el camino parece cada vez más improbable.
El Camino por Delante
A medida que Aston Martin avanza, la presencia de Lance Stroll en la parrilla sigue siendo un foco de debate. Su campaña de 2025 podría ser un año definitorio, ya que las inversiones del equipo comienzan a dar frutos. Si Stroll puede finalmente salir de la sombra de su padre y elevarse para cumplir con las ambiciones del equipo sigue siendo una de las preguntas más fascinantes—y controvertidas—de la Fórmula 1.