Durante años, NASCAR ha luchado por recuperar el dominio en el mainstream que alguna vez disfrutó. La disminución de las audiencias televisivas, los obstáculos de patrocinio y el cambio en la demografía de la audiencia han obligado al deporte a reinventarse. Pero en 2025, una renovación mediática promete dar nueva vida a las carreras de coches de serie.
Con un acuerdo de transmisión ampliado que incluye Fox Sports, NBC Sports, Amazon Prime Video, Warner Bros. Discovery y The CW, NASCAR está listo para un resurgimiento.
Sin embargo, mientras los nuevos contratos televisivos están aumentando la visibilidad, una batalla diferente se está librando bajo el capó—una que podría redefinir la identidad misma de NASCAR:
Toyota vs. Ford.
A medida que el fabricante estadounidense se retira, el gigante japonés está duplicando su apuesta—y está claro que Toyota se está posicionando como el nuevo rey de NASCAR.
La Inversión Implacable de Toyota en NASCAR: Un Golpe Maestro de Marketing
El viaje de Toyota en NASCAR comenzó en 2004 con su programa de Truck Series, y para 2007, se había expandido a las Xfinity y Cup Series. Inicialmente recibido con escepticismo, la marca ha consolidado su posición como una potencia, ganando múltiples campeonatos y desarrollando pilotos de élite a través de su programa Toyota Racing Development.
Pero Toyota no está aquí solo por los trofeos, está aquí por la dominación del mercado.
- Toyota gastó aproximadamente $3.37 millones en publicidad durante las carreras en vivo de la Cup Series en 2023, convirtiéndose en el mayor anunciante de NASCAR.
- Marcas como Wendy’s ($2.52M) y Progressive ($1.85M) también han invertido, pero ninguna al nivel de Toyota.
- La agresiva estrategia de marketing de Toyota ha fortalecido sus ventas de camiones y SUV en América del Norte, dándole credibilidad entre los fanáticos de NASCAR, que son ferozmente leales a las marcas.
Y los números no mienten:
- Las ventas de Toyota en EE. UU. crecieron un 3.7% en 2024.
- Las ventas de vehículos eléctricos se dispararon un 53.1%, alineándose perfectamente con el potencial cambio hacia la electrificación de NASCAR.
Toyota no solo está manteniendo a NASCAR a flote, está aprovechando el deporte para dominar el mercado automotriz estadounidense.
Ford: De Potencia en NASCAR a Jugador Reacio
En un momento, Ford era intocable en NASCAR.
- La compañía gastó más de $100 millones en deportes de motor en 2006.
- Tenía patrocinio principal del Ford 400 en el Homestead-Miami Speedway.
- El icónico óvalo azul era sinónimo de equipos legendarios como RFK Racing, Team Penske y Stewart-Haas Racing.
Pero en la última década, la huella financiera de Ford en NASCAR se ha erosionado.
- El declive comenzó en 2014 cuando Ford finalizó su patrocinio principal en Homestead.
- Desde entonces, la compañía ha reducido gradualmente su gasto en marketing y patrocinios en pista.
- Ford está priorizando su transición a vehículos eléctricos, pero sin la misma inversión agresiva en NASCAR que Toyota.
Mientras Toyota ve la integración de vehículos eléctricos como una oportunidad, el CEO de Ford, Jim Farley, ha sido más cauteloso, afirmando que la economía del comercio minorista de vehículos eléctricos a gran escala sigue siendo “irresoluble.”
Y mientras Toyota está lista para lanzar una camioneta totalmente eléctrica en América en 2025, Ford ha sido más reacio a abrir su bolsillo para una jugada directa de vehículos eléctricos en NASCAR.
El Cambiante Panorama Mediático: Por Qué Toyota Ve Oportunidad Donde Ford Vacila
La inversión máxima de Ford en NASCAR coincidió con una era en la que el deporte dominaba la televisión en red.
- En ese entonces, NASCAR era un gigante de las audiencias en FOX y NBC.
- Ahora, la audiencia de televisión tradicional está disminuyendo, y los servicios de streaming están reconfigurando el panorama.
- Con NASCAR cambiando hacia acuerdos de streaming, Ford podría no ver el mismo valor de marketing que una vez vio.
Mientras tanto, Toyota está jugando un juego a largo plazo, reconociendo que la nueva estrategia mediática multiplataforma de NASCAR podría aumentar la exposición de maneras innovadoras.
Para Toyota, la inversión no se trata solo de NASCAR, se trata de asegurar el mercado de camionetas en América.
El Veredicto: ¿Es Toyota el Nuevo Rey de NASCAR?
Los números cuentan la historia:
✅ Toyota está gastando más que Ford en publicidad.
✅ Toyota está capitalizando la transición a vehículos eléctricos de NASCAR.
✅ Toyota está ampliando su compromiso con NASCAR, mientras Ford se está retirando.
Si Ford no se reafirma pronto, corre el riesgo de ceder la lealtad de marca de NASCAR—y el mercado de camionetas estadounidense—a su rival japonés.
Por ahora, el mensaje es claro:
Ford puede tener historia, pero Toyota está moldeando el futuro de NASCAR.
La pregunta es—¿luchará Ford para recuperar su posición?