El Gran Premio de Hungría ofreció una exhibición asombrosa de maestría estratégica y paradas en boxes ultrarrápidas, con McLaren realizando el cambio de neumáticos más rápido del año hasta ahora. Lando Norris y su equipo de McLaren superaron a sus competidores en Hungaroring con una audaz estrategia de una sola parada, asegurando la victoria a pesar de un inicio complicado en la carrera.
Descendiendo del tercer lugar a detrás de George Russell y Fernando Alonso al principio, Norris optó por un atrevido enfoque de una sola parada para ganar posición en pista sobre su compañero de equipo Oscar Piastri, que estaba en un plan de dos paradas. Una parada en boxes ultrarrápida de 1.94 segundos en la vuelta 31 impulsó a Norris de nuevo al cuarto lugar y, en última instancia, le aseguró la victoria. El equipo de boxes de McLaren también ejecutó una parada idéntica de 1.94 segundos para Piastri.
La apuesta por la estrategia dio grandes frutos, con Norris señalando que fue la primera carrera donde una estrategia completamente diferente realmente dio dividendos. La era del dominio de Red Bull en las paradas en boxes parece estar disminuyendo, con McLaren presumiblemente los tiempos más rápidos, mientras Ferrari emerge como el equipo más consistente en paradas. De las diez paradas más rápidas del año hasta ahora, McLaren ocupa los dos primeros lugares, Red Bull el tercero, y Ferrari presume de seis impresionantes.
El Gran Premio de Hungría mostró no solo una emocionante acción en pista, sino también el papel crucial de la eficiencia en las paradas en boxes para determinar los resultados de la carrera. Con el cambio de neumáticos ultrarrápido de McLaren estableciendo un nuevo estándar de velocidad y precisión, la competencia en el pit lane se está intensificando a medida que los equipos luchan por la perfección en todos los aspectos de las carreras de Fórmula 1.