Toto Wolff, el cerebro detrás del éxito sin precedentes de Mercedes en la Fórmula 1, ha lanzado una bomba: está listo para dar un paso al lado como director del equipo si se presenta el sucesor perfecto. Dirigiendo a las Flechas de Plata desde 2013, Wolff ha guiado al equipo a través de una era dorada, logrando un asombroso total de ocho campeonatos de Constructores consecutivos y siete campeonatos de Pilotos. Sin embargo, las tornas parecen estar cambiando, ya que la introducción de coches de efecto suelo en 2022 ha llevado a Mercedes a luchar, asegurando solo seis victorias en Grandes Premios desde su última victoria en el campeonato en 2021.
A diferencia del ex-rival Christian Horner, quien enfrentó el despido tras el colapso del reinado de Red Bull, la posición de Wolff sigue siendo segura. ¿La razón? No es solo el director del equipo; posee participaciones en la propiedad de Mercedes, lo que le otorga una posición única. En una revelación sincera, Wolff declaró: “Estoy en una, tal vez, posición un poco más favorable en la que para irme tengo que despedirme a mí mismo.” Esto lo coloca en una posición poderosa para dar forma al futuro del equipo, ya que puede optar por hacer la transición a otros roles como CEO o presidente si es necesario.
Inspirándose en el modelo operativo de McLaren, donde el CEO Zak Brown se centra en las empresas comerciales mientras Andrea Stella gestiona la parte de carreras, Wolff insinuó una reestructuración similar para Mercedes. “Si siento que tengo a alguien más que puede contribuir más que yo, dejaría el puesto de inmediato,” afirmó, enfatizando su compromiso con el éxito del equipo por encima de su propia posición. Wolff es firme en identificar futuros líderes dentro de la organización, afirmando: “A largo plazo, identificaría a estas personas que pueden hacer eso.”
Reflexionando sobre su evolución como líder, Wolff admitió: “¿Soy el tipo [que era] en 2014? Ciertamente no, pero estoy tratando de compensar.” Con una reputación como un competidor feroz, reconoce que su enfoque se ha suavizado a lo largo de los años, un cambio que cree que necesita ser abordado. Como el director de equipo que más tiempo lleva en la Fórmula 1, Wolff contrasta marcadamente con la puerta giratoria de liderazgo que se observa en otros equipos, donde la frecuencia de cambios a menudo refleja la de un club de fútbol.
El contexto histórico de la F1 sugiere que un copropietario también debería asumir el rol de director de equipo, como lo ejemplifican íconos como Colin Chapman, Ron Dennis y Frank Williams. La posición actual de Wolff se destaca contra este telón de fondo, particularmente en medio del reciente escrutinio que enfrenta su amigo cercano Fred Vasseur en Ferrari, donde las luchas al inicio de la temporada llevaron a una intensa especulación mediática sobre su futuro.
Wolff recuerda sus propios desafíos iniciales en Mercedes, donde las dudas sobre su liderazgo resonaban con fuerza: “Al principio de mi carrera, hubo muchas veces en las que escuché ‘¿Sigue siendo Toto el tipo adecuado?’” Este período turbulento vio el desarrollo de la rivalidad entre Lewis Hamilton y Nico Rosberg, cambiando la narrativa entre elogios y críticas. Resumió la experiencia, diciendo: “Creo que eso se multiplica por cien y luego estás en Italia,” refiriéndose al intenso escrutinio que enfrentan sus pares.
A medida que el panorama de la F1 continúa evolucionando, la disposición de Toto Wolff a dar un paso atrás por el bien del equipo subraya un compromiso con la excelencia que podría redefinir el liderazgo en el deporte. La pregunta sigue siendo: ¿quién podría ser el próximo gran líder de Mercedes? La apertura de Wolff al cambio podría muy bien señalar una nueva era para las Flechas de Plata.