Las esperanzas de Max Verstappen de defender su título de F1 han recibido un gran golpe tras un choque dramático con el novato Kimi Antonelli en el Gran Premio de Austria. El piloto de Red Bull se vio obligado a retirarse en la primera vuelta después de ser sacado de la carrera por el piloto de Mercedes.
El bloqueo de Antonelli al frenar causó caos en la Curva 3, lo que llevó a una colisión con Verstappen que terminó prematuramente con ambas carreras. Verstappen expresó su frustración por la radio del equipo, calificando el incidente como un «golpe loco» causado por «idiotas de mierda».
Con los rivales del campeonato Lando Norris y Oscar Piastri liderando la carrera, Verstappen podría encontrarse a 69 puntos de desventaja en la clasificación. A pesar del contratiempo, Verstappen puede respirar aliviado ya que la colisión no fue su culpa, lo que le evita acumular puntos de penalización en la licencia que podrían haber resultado en una prohibición de carrera.
Mientras Verstappen navega por las secuelas de esta dramática colisión, la carrera por el título de F1 ha tomado otro giro inesperado, dejando a los aficionados al borde de sus asientos mientras el drama se desarrolla en la pista.