La Scuderia Ferrari ha desatado una tormenta de debate con su decisión espectacular de fichar a Lewis Hamilton para la temporada 2025 de Fórmula 1. Mientras los aficionados y los expertos admiran el espectáculo de ver a Hamilton vistiendo el rojo de Ferrari, los críticos están condenando el movimiento como una apuesta costosa por un piloto que muchos creen que ha pasado su mejor momento.
Uno de los detractores más vocales es Lucas di Grassi, ex campeón de Fórmula E, quien no se guardó sus palabras en su crítica a la estrategia de Ferrari. “Nunca contrataría a Hamilton para Ferrari si estuviera a cargo. Es demasiado caro y, a los 39 años, ya no está en su mejor momento”, dijo Di Grassi sin rodeos. Su sentimiento refleja las preocupaciones dentro del paddock de F1, donde las opiniones sobre el movimiento de Hamilton siguen estando marcadamente divididas.
El Costo de la Grandeza
La decisión de Ferrari de fichar al campeón mundial de siete veces de Mercedes reportedly viene con un asombroso precio de $50 millones. Para Di Grassi, las cuentas simplemente no cuadran. Argumentó que Maranello debería haber priorizado un talento más joven capaz de ofrecer éxito a largo plazo. “Ferrari necesita a alguien que pueda crecer en su mejor momento dentro del equipo, no a un piloto que ya ha visto sus mejores días”, explicó el brasileño.
Pero el director del equipo Ferrari, Fred Vasseur, no está perdiendo el sueño por las críticas. Respondiendo a los detractores, declaró con confianza que la gran experiencia y el pedigrí de campeón de Hamilton aportarían una “nueva perspectiva” a la Scuderia. “La visión de Lewis podría ser exactamente lo que necesitamos para dar el siguiente paso”, dijo Vasseur, desestimando el creciente escepticismo.
Opiniones Divididas en el Paddock de F1
Lucas di Grassi no está solo al cuestionar el audaz movimiento de Ferrari. El exjefe de Ferrari, Marco Mattiacci, también había expresado su preocupación, calificando la contratación de Hamilton como un “error” para un equipo que aún persigue su primer Campeonato de Constructores desde 2008. Los críticos argumentan que la última temporada de Hamilton en Mercedes—donde no logró asegurar una sola victoria—subraya su rendimiento decreciente en el más alto nivel.
Sin embargo, el historial de Hamilton habla por sí mismo. Con 103 victorias en Grandes Premios y siete títulos mundiales, el británico sigue siendo uno de los pilotos más condecorados en la historia de la Fórmula 1. Ferrari espera que su mentalidad ganadora y su experiencia inigualable galvanicen al equipo y cierren la brecha con sus rivales perennes, Red Bull Racing.
Apostando Fuerte por 2025
La fe de Ferrari en Hamilton no es sin razón. El equipo terminó segundo en la clasificación de Constructores de 2024, pero se mantuvo muy por detrás del ritmo dominante de Red Bull. Con una alineación de pilotos renovada que incluye a Hamilton y Charles Leclerc, Ferrari tiene como objetivo plantear un serio desafío por el campeonato en 2025.
La apuesta es clara: Ferrari confía en la experiencia de Hamilton para aportar cohesión y estrategia a un equipo que a menudo ha sido afectado por errores operativos. Si el piloto de 39 años puede ofrecer los resultados que justifiquen su elevado salario sigue siendo la pregunta definitiva.
El Reloj Está Corriendo
A medida que Hamilton se prepara para comenzar este nuevo capítulo en su ilustre carrera, la presión está aumentando—no solo sobre el británico, sino sobre Ferrari mismo. La contratación ha polarizado el mundo de las carreras, con aficionados divididos entre la emoción y el escepticismo.
¿Valdrá la pena la apuesta de $50 millones de Ferrari, o se convertirá en una historia de advertencia sobre una ambición mal calculada? La respuesta llegará pronto, ya que la temporada 2025 se acerca, con Maranello listo para silenciar a sus críticos o añadir otro capítulo a su histórica legado de triunfos y tribulaciones.
Por ahora, la única certeza es esta: el movimiento de alto riesgo de Ferrari tiene a todos observando—y eso es exactamente de lo que la Scuderia se alimenta.