Lewis Hamilton, el siete veces campeón del mundo, enfrentó un humillante revés durante la clasificación de sprint para el Gran Premio de Bélgica. El giro de Hamilton en la última curva desvaneció sus esperanzas, resultando en una salida temprana de la sesión y una decepcionante 18ª posición de salida para la carrera del sábado.
A pesar de las especulaciones sobre un fallo técnico que causó el giro, Hamilton asumió toda la responsabilidad por el incidente. En una sombría entrevista de 47 segundos con Sky Sports F1, admitió que era la primera vez que ocurría un evento así en su ilustre carrera. La frustración era palpable mientras Hamilton describía sin rodeos el manejo de su coche SF-25 como «no genial», mostrando su decepción con el rendimiento del equipo.
Este último contratiempo se suma a la serie de decepciones de Hamilton desde que se unió a Ferrari a principios de este año. Mientras su compañero Charles Leclerc ha conseguido múltiples podios, Hamilton aún no ha logrado un lugar en el podio con su nuevo equipo. Los resultados mediocres y la actitud negativa de Hamilton en las entrevistas sugieren una transición desafiante de sus años dominantes en Mercedes al equipo Ferrari en apuros.
La anticipación en torno a las mejoras de Ferrari para la carrera de Spa se vio ensombrecida por el rendimiento decepcionante de Hamilton, levantando dudas sobre su capacidad para adaptarse al nuevo coche. A medida que se prepara para el sprint del sábado, Hamilton sigue siendo optimista sobre un mejor resultado, pero reconoce la difícil batalla que enfrenta.
Mantente atento mientras se desarrolla el drama en el Gran Premio de Bélgica, con las inesperadas luchas de Hamilton ocupando el centro del escenario en medio de la feroz competencia en la pista.