¡La investigación de la FIA revela el cumplimiento de Ferrari y Leclerc en medio de la controversia sobre la presión de los neumáticos!
En un giro dramático de los acontecimientos previo al próximo Gran Premio, la FIA ha completado una exhaustiva inspección de componentes vitales del reciente GP de Hungría, y los resultados están aquí: ¡Ferrari y Charles Leclerc han salido ilesos! Este riguroso examen siguió a la tensión del fin de semana de carrera en torno a las regulaciones de presión de los neumáticos, con preguntas sobre si los equipos estaban manipulando configuraciones para obtener una ventaja competitiva.
Como parte de su protocolo estándar, la FIA publica informes detallando los resultados de las inspecciones técnicas después de cada carrera, proporcionando información sobre la integridad de la competición. Estas verificaciones adicionales, que van más allá de las evaluaciones regulares previas a la carrera, son cruciales para garantizar la equidad en la arena de alto riesgo de las carreras de Fórmula 1. Notablemente, estas verificaciones han llevado anteriormente a repercusiones significativas, como la descalificación de George Russell en el GP de Bélgica en 2024 por presentar un Mercedes con peso inferior al permitido.
El foco no estaba solo en el Ferrari de Leclerc, sino también en el Mercedes de George Russell y el Aston Martin de Fernando Alonso. Los inspectores se centraron en el Sistema de Monitoreo de Presión de Neumáticos (TPMS), una tecnología crítica que rastrea continuamente la presión de los neumáticos en tiempo real. La investigación confirmó que los sensores, el cableado y los sellos anti-manipulación en el coche de Leclerc estaban intactos, asegurando que los datos de telemetría reflejaban las verdaderas condiciones de los neumáticos a lo largo de la carrera.
Tanto Leclerc como Russell optaron por una estrategia de dos paradas durante la carrera, mientras que Alonso realizó una sola parada. Las minuciosas verificaciones de la FIA revelaron que las presiones de los neumáticos en los vehículos inspeccionados se mantuvieron dentro de las regulaciones a lo largo del evento. Este hallazgo pone en duda la especulación de Russell tras la carrera de que Ferrari podría haber aumentado intencionadamente la presión de los neumáticos durante el último stint para mitigar el desgaste de los mismos. Si bien es legal usar presiones de neumáticos más altas de las especificadas, cualquier desviación por debajo del mínimo establecido por Pirelli podría haber resultado en severas penalizaciones, incluida la descalificación.
El informe de la FIA destacó que todos los componentes examinados cumplían con las regulaciones técnicas, disipando cualquier preocupación inmediata sobre la adherencia de Ferrari a las reglas. Este resultado es un gran alivio para los entusiastas de Ferrari y los aficionados de Leclerc, quienes pueden respirar tranquilos sabiendo que el rendimiento de su equipo se basa en fundamentos sólidos en medio del escrutinio continuo del deporte.
A medida que el mundo del automovilismo se prepara para la próxima carrera, el drama en torno a la gestión de neumáticos y el cumplimiento sin duda seguirá cautivando a los aficionados y analistas por igual. Con la FIA manteniendo un ojo atento, los equipos deben navegar la delgada línea entre la estrategia competitiva y el cumplimiento regulatorio en su incesante búsqueda de la victoria. ¡Estén atentos mientras les traemos los últimos desarrollos del emocionante mundo de las carreras de Fórmula 1!