El renombrado Corkscrew fue la destacada curva para la carrera que tuvo lugar durante el fin de semana. Foto: Kevin Dejewski
El pintoresco autódromo de Laguna Seca fue el escenario del evento de IndyCar el fin de semana pasado, con el circuito histórico ocupando un lugar no convencional en medio del calendario de carreras.
En la parte final de la carrera, el caos se instauró, pero Alex Palou logró mantener su posición al frente del pelotón, asegurando su segunda victoria de la temporada y asumiendo el liderazgo en términos de puntos.
Tanto Colton Herta como Alexander Rossi tuvieron actuaciones impresionantes, lo que resultó en podios para ambos pilotos. Sin embargo, no pudieron evitar sentir un toque de decepción al quedarse cortos de conseguir la victoria por un margen tan estrecho.
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El equipo Penske tuvo un fin de semana que podría describirse como mediocre como mínimo y catastrófico en el peor escenario. Después de una exhibición dominante en Road America, los pilotos del equipo terminaron en las posiciones séptima, 19ª y 21ª.
Cuando IndyCar regrese a la pista dentro de dos semanas, todos los autos estarán equipados con los tan esperados componentes híbridos. Si esto tendrá un impacto significativo en el orden de la carrera aún está por verse.