El paddock de la Fórmula 1 ha sido sumido en el caos mientras la FIA continúa despidiendo a funcionarios de alto perfil, dejando a pilotos, equipos y aficionados cuestionando la estabilidad del organismo que rige el automovilismo. En una revelación sorprendente, el comisario Tim Mayer reveló que fue despedido por mensaje de texto por un asistente del presidente de la FIA Mohammed Ben Sulayem, un movimiento que ha generado críticas contundentes en toda la parrilla.
«Mayer Habla: Despedido por Mensaje de Texto, Dejado en Shock»
Mayer, quien también se desempeña como organizador deportivo de los tres Grandes Premios de EE. UU., expresó incredulidad ante su despido abrupto. Su despido se produce en medio de la controvertida destitución de la directora de carrera adjunta de Fórmula 1 Janette Tan, lo que agrava las preocupaciones sobre la gestión interna de la FIA.
“Después de 15 años de ofrecer mi tiempo como comisario, una década enseñando a otros comisarios y cientos de horas de voluntariado en otros roles, recibí un mensaje de texto de uno de sus asistentes”, dijo Mayer a la BBC. “Estoy incrédulo. No se están haciendo ningún favor. Literalmente se están quedando sin gente para hacer estos trabajos.”
«Los Pilotos Exigen Respuestas»
Los repentinos cambios han dejado a los pilotos furiosos. George Russell, un director de la Asociación de Pilotos de Grandes Premios (GPDA), expresó su preocupación tras una reunión de pilotos en Qatar.
“Justo cuando hemos pedido transparencia y consistencia, estamos deshaciéndonos de dos personas altamente importantes en el organismo gobernante,” comentó Russell. “Todavía no tenemos ninguna razón para la destitución de [el ex director de carrera] Niels Wittich. Lo primero que supe sobre la salida de Tim fue a través de los medios. ¿Quién será el siguiente en ser despedido?”
Los comentarios de Russell destacan la creciente frustración entre los pilotos, quienes están cada vez más a oscuras sobre los procesos de toma de decisiones de la FIA.
«Nuevo Director de Carrera Bajo Presión»
Con la salida de Tan y la misteriosa destitución de Wittich antes del Gran Premio de Las Vegas, el recién nombrado director de carrera Rui Marques se ha visto lanzado a una posición abrumadora. Marques ahora supervisa tanto las funciones de Fórmula 1 como de Fórmula 2 este fin de semana en Qatar.
Aunque Marques fue elogiado por su manejo del caótico GP de Las Vegas, la carga de trabajo aumentada ha suscitado preocupaciones. Mayer advirtió sobre las intensas demandas a los oficiales de carrera de primer nivel:
“No hay muchos directores de carrera de la FIA de ‘nivel platino’, que es la certificación de más alto nivel de la FIA. Marques está bajo una presión increíble.”
«La FIA Defiende Sus Decisiones Ante el Creciente Examen»
Un portavoz de la FIA minimizó las salidas, enfatizando el papel del nuevo Centro de Operaciones Remotas en Ginebra, que está diseñado para apoyar el control de la carrera. El organismo gobernante insiste en que esta innovación ha hecho que el trabajo del director de carrera sea “menos oneroso”.
“El director de carrera ahora puede centrarse completamente en la gestión de la carrera sin verse agobiado por deberes periféricos”, declaró el portavoz.
La FIA también señaló su programa de alto rendimiento, que tiene como objetivo capacitar a futuros directores de carrera y comisarios para llenar el creciente vacío.
«Los pilotos divididos sobre el rendimiento de Marques»
A pesar de la agitación, los pilotos ofrecieron una perspectiva mixta pero cautelosamente optimista sobre Marques. Charles Leclerc de Ferrari aplaudió su disposición para interactuar con los pilotos:
“La primera carrera [en Las Vegas] ha ido muy bien. Ha sido muy abierto, escuchándonos a nosotros los pilotos y haciendo las cosas de la manera correcta.”
Sin embargo, quedan preguntas sobre si una sola persona puede gestionar la monumental carga de trabajo en múltiples categorías.
«El enfrentamiento por el título de constructores ensombrecido por el caos de la FIA»
A medida que McLaren y Ferrari luchan por el Campeonato de Constructores con dos carreras restantes, el caos interno de la FIA ha robado el protagonismo. Los equipos y pilotos se preguntan si esta inestabilidad impactará la equidad y consistencia de la arbitraje en las etapas finales cruciales de la temporada.
Con la credibilidad de la FIA bajo el microscopio, el mundo del automovilismo espera claridad y estabilidad. Pero a medida que las grietas se amplían, no se puede evitar preguntar: ¿Está el organismo rector de la Fórmula 1 dirigiéndose a su propia trampa de grava?