¿Romperá el Mustang GTD récords en el Infierno Verde?
El Mustang GTD de Ford, la máquina de alto rendimiento más ambiciosa de la marca hasta ahora, está listo para responder a una pregunta crucial el 10 de diciembre de 2023: ¿Puede conquistar el Nürburgring Nordschleife en menos de siete minutos? Si tiene éxito, no solo asegurará su lugar en la historia como el automóvil de producción americano más rápido en completar el icónico circuito de 12.9 millas, sino que también desafiará a algunos de los supercoches europeos más reverenciados del mundo.
Las apuestas: Muscle americano vs. Leyendas globales
Ford no ha ocultado su objetivo desde que presentó el Mustang GTD en agosto de 2023. Un tiempo de vuelta de menos de 7 minutos destronaría al actual poseedor del récord de automóviles de producción americanos, el Dodge Viper ACR, que marcó 7:01.30 en 2017. También colocaría al GTD en compañía de élite junto al Lamborghini Aventador LP750-4 Superveloce (6:59.73) y comenzaría a acercarse a los exóticos alemanes e italianos como Porsche y Mercedes-AMG.
Sin embargo, romper el récord general de automóviles de producción del Nürburgring de 6:29.09, establecido por el Mercedes-AMG One, está fuera del alcance del Mustang GTD. Esa marca pertenece a hipercars equipados con tecnología de nivel Fórmula 1, una categoría muy por encima del propósito del GTD.
Competidores de Motor Delantero: Una Batalla Más Estrecha
Donde el GTD podría brillar verdaderamente es en el ámbito de los coches de producción con motor delantero, un club exclusivo dominado por el Mercedes-AMG GT Black Series. Con un tiempo impresionante de 6:43.61, el Black Series ha establecido un referente que el muscle car de Ford con 815 caballos de fuerza puede aspirar a desafiar. Sin embargo, el AMG GT Black Series no está solo en la cima; el Porsche 911 GT2 RS Manthey marcó 6:38.83, mientras que el AMG One sigue siendo el campeón reinante de la pista.
El Mustang GTD necesitará superar el umbral de 7 minutos primero, pero la confianza de Ford sugiere que puede estar buscando igualar o incluso superar el rendimiento del AMG GT Black Series.
Por Qué el Mustang GTD Podría Tener Éxito
El Mustang GTD trae credenciales serias a la pelea:
- Poder: Un motor V8 sobrealimentado de 815 caballos de fuerza proporciona un rendimiento asombroso.
- Equilibrio: Con una distribución de peso 50/50 casi perfecta lograda por su caja de cambios montada en la parte trasera, el GTD es una rareza entre los coches de motor delantero.
- Aerodinámica: Un paquete aerodinámico radical, que incluye un alerón ajustable y elementos activos, asegura el máximo agarre a las velocidades del Nürburgring.
- Chasis basado en GT3: Desarrollado con lecciones de la división de carreras de Ford, el GTD toma prestado en gran medida del exitoso programa GT3 de Ford.
- Benchmarking: Ford estudió explícitamente el Mercedes-AMG GT Black Series y el Porsche 911 GT2 RS durante el desarrollo, adaptando el GTD para igualar a estos pesos pesados.
Con una velocidad máxima de 202 mph y un diseño perfeccionado para la precisión y la velocidad, el GTD está lejos de ser un coche musculoso tradicional—es un prototipo inspirado en las carreras de resistencia disfrazado de coche de carretera.
¿Cuánto romperá el récord de 7 minutos?
La campaña de teasers en curso de Ford casi confirma que el GTD ya ha superado la barrera de los 7 minutos. La verdadera pregunta es: ¿Cuánto por debajo de 7 minutos? Si Ford está apuntando a coches como el AMG GT Black Series, el GTD podría registrar un tiempo en el rango de 6:40–6:50, consolidando aún más su lugar entre las leyendas del automovilismo.
¿Qué sigue?
Si el Mustang GTD cumple con su promesa, podría redefinir lo que se espera de los coches de rendimiento americanos, cerrando la brecha entre los fabricantes estadounidenses y los titanes europeos del Nürburgring. Con su debut en Le Mans Garage 56 en el horizonte, el GTD es una declaración audaz de que Ford está listo para enfrentarse a lo mejor del mundo—no solo en la pista, sino también en el showroom.
Mientras el mundo espera el 10 de diciembre, la búsqueda de la gloria en Nürburgring por parte de Ford simboliza una nueva era para la ingeniería de rendimiento americana. Una cosa es segura: El Infierno Verde está a punto de escuchar el rugido de un Mustang como nunca antes.