La empresa estadounidense de vehículos eléctricos, Fisker, podría estar al borde del fin, y Magna International, la empresa que produce el SUV Ocean, ya ha dejado claro que la producción del modelo 100% eléctrico está detenida, lo que sugiere que el SUV podría no volver a ser producido.
Aunque Fisker aún no se ha pronunciado al respecto, la verdad es que la empresa liderada por Henrik Fisker sigue viviendo en un futuro de incertidumbre, debido a las dificultades financieras para mantener la empresa activa, y hasta el momento no ha encontrado un inversor que asegure el futuro de Fisker.
La marca estadounidense que ha hecho todo lo posible para mantenerse alejada de una posible quiebra, tiene en el Ocean el único modelo en comercialización y recientemente ha bajado los precios del SUV 100% eléctrico para intentar sobrevivir.
Lo cierto es que Magna International, la empresa que construye el Ocean para Fisker, al igual que lo hace con otros modelos como el Jaguar E-Pace o el BMW Z4, a través de Magna Steyr, una subsidiaria de la empresa austriaca, ha informado que la producción del Ocean se detuvo a principios de marzo, y lo que debería ser una pausa de seis semanas, continúa y no se sabe si se reanudará la producción del modelo de Fisker.
“La producción del vehículo está detenida en este momento. Nuestra perspectiva actual supone que no habrá más producción”, destacó en un comunicado enviado a los accionistas de Fisker, Swamy Kotagiri, CEO de Magna International.
Esta es la segunda vez que la empresa estadounidense enfrenta problemas financieros, después de que en 2012 la producción se interrumpiera debido a la quiebra de A123 Systems, que producía las baterías para el híbrido plug-in Fisker Karma.
Cabe recordar que Fisker tenía previsto lanzar en Europa en 2025 la pick-up 100% eléctrica Alaska, un modelo que estaba programado para tener una producción limitada.