La carrera de Romain Grosjean en IndyCar está al borde del abismo después de que Juncos Hollinger Racing confirmara que Conor Daly ocupará el último asiento para la temporada 2025. Con pocas opciones restantes en la serie, el ex piloto de F1 de 38 años y favorito de los aficionados ahora enfrenta decisiones difíciles sobre su futuro en las carreras.
Juncos Elige a Daly Sobre Grosjean
La decisión de Juncos de retener a Daly junto a Sting Ray Robb efectivamente cierra la puerta a las perspectivas inmediatas de Grosjean en IndyCar. El anuncio representa un golpe significativo para Grosjean, quien se unió a Juncos tras una salida impulsada por un arbitraje de Andretti Autosport a finales de 2023. A pesar de destellos de brillantez, incluyendo actuaciones destacadas en su temporada de debut en IndyCar, el francés ha luchado por encontrar consistencia.
Christian Horner, el director del equipo, elogió la destreza de Daly en óvalos como un factor clave en la decisión, una habilidad que Grosjean ha admitido abiertamente que no es su punto fuerte. En las últimas cinco carreras de 2024, Daly superó a Grosjean, sellando el destino del veterano.
Una Temporada Tonta Abarrotada
Los únicos asientos de IndyCar a tiempo completo que quedan son en Dale Coyne Racing, un equipo históricamente conocido por sus alineaciones de puerta giratoria y su dependencia de pilotos que aportan respaldo financiero. Aunque la experiencia de Grosjean lo convierte en un candidato atractivo, enfrenta una dura competencia de pilotos como Rinus Veekay, Linus Lundqvist y Pietro Fittipaldi, quien supuestamente trae un patrocinio significativo.
Las dificultades financieras de Dale Coyne complican aún más las posibilidades de Grosjean. Sin un gran presupuesto o paquete de patrocinio, Grosjean necesitaría que el equipo asumiera un riesgo puramente basado en el talento, un riesgo que Coyne podría no estar dispuesto a tomar dado su precario estado.
Más allá de IndyCar: ¿Qué sigue para Grosjean?
Si no se materializa un acuerdo en IndyCar, Grosjean podría verse obligado a buscar en otros lugares. Sus actuaciones en 2024 en el programa Lamborghini en IMSA y el Campeonato Mundial de Resistencia (WEC) mostraron su adaptabilidad y habilidad, aunque el esfuerzo luchó por mantener el ritmo con equipos más desarrollados. Para añadir a la incertidumbre, la separación de Lamborghini con Iron Lynx deja al fabricante sin un socio claro para 2025, limitando las oportunidades de Grosjean en las carreras de resistencia.
La participación en las 24 Horas de Le Mans está fuera de la mesa por ahora, ya que el programa WEC de Lamborghini no alineará coches la próxima temporada. Incluso una campaña a tiempo completo en IMSA parece poco probable, ya que la participación de Lamborghini se centrará únicamente en eventos de larga distancia.
Una Carrera de Picos y Valles
El viaje de Grosjean en IndyCar comenzó con gran promesa. Apodado “El Fénix” tras sobrevivir a su accidente en llamas en el Gran Premio de Bahréin de 2020, rápidamente se convirtió en un favorito de los aficionados. Su temporada debut con Dale Coyne Racing en 2021 incluyó una pole position y tres podios, consolidando su reputación como un competidor feroz.
Sin embargo, su posterior traslado a Andretti Autosport no logró ofrecer resultados consistentes. Aunque hubo momentos de brillantez, incluyendo casi victorias y fuertes actuaciones en clasificación, la suerte y los errores socavaron sus campañas. La estancia de Grosjean en Juncos en 2024, que él mismo llamó su “mejor año”, vio resultados destacados ocasionales pero, en última instancia, no cumplió con las expectativas.
Una Decisión Difícil por Delante
Grosjean debe decidir ahora si luchar por uno de los asientos restantes en Dale Coyne o alejarse completamente de IndyCar. Con ninguna opción de primer nivel disponible, quedarse en la serie probablemente significaría otro año con un equipo en dificultades, una perspectiva que puede no alinearse con sus aspiraciones en esta etapa de su carrera.
Alternativamente, Grosjean podría pivotar completamente hacia las carreras de autos deportivos, donde su talento y experiencia podrían convertirlo en un activo valioso para los fabricantes. Sin embargo, la falta de un programa garantizado a tiempo completo en 2025 también complica este camino.
¿El Fin del Sueño de IndyCar?
Para un piloto que capturó los corazones de los aficionados con su resiliencia y determinación, la posibilidad de dejar IndyCar sin alcanzar su máximo potencial es una realidad agridulce. La historia de Grosjean es una de picos increíbles y valles frustrantes, y aunque su talento es innegable, la consistencia y estabilidad necesarias para prosperar en IndyCar le han eludido.
Ya sea que elija seguir luchando por un asiento o explorar nuevos horizontes, el próximo movimiento de Grosjean marcará un capítulo definitorio en su ilustre carrera.