La temporada 2024 de la Serie de la Copa NASCAR concluyó de manera dramática, con Joey Logano reclamando su tercer título de la Serie de la Copa en un año definido por la resiliencia, regresos improbables y más que un poco de controversia. Si bien la determinación y astucia de Logano en la pista fueron innegables, su triunfo ha desatado una serie de comparaciones con otro gran piloto de NASCAR—Jimmie Johnson—destacando una red de inquietantes similitudes entre sus respectivas carreras hacia el tercer campeonato.
La Temporada Cenicienta
El camino de Logano hacia el campeonato fue todo menos directo. Apenas logró entrar a los playoffs, clasificándose 15º en puntos tras una dramática victoria por eficiencia de combustible en una carrera de Nashville que se extendió a cinco prórrogas. Más tarde, fue eliminado de la Ronda de 8, solo para ser reinstalado tras la penalización de Alex Bowman. A pesar de esta montaña rusa, la carrera por el título de Logano lo consolidó como el primer piloto en ganar tres campeonatos en la era de los playoffs de eliminación, uniéndose a un club de élite de pilotos que han conseguido tres títulos antes de cumplir 35 años.
Paralelismos con la Temporada 2008 de Jimmie Johnson
La comunidad de NASCAR, particularmente sus ávidos detectives de Reddit, ha descubierto una serie de conexiones sorprendentes entre el campeonato de Logano en 2024 y la carrera por el título de Johnson en 2008. Estos paralelismos trascienden la mera coincidencia, dejando a los aficionados preguntándose si la historia de alguna manera se repite de formas inesperadas.
- Conexión de la Pole del Daytona 500: Tanto Johnson en 2008 como Logano en 2024 comenzaron sus temporadas de campeonato ganando la pole del Daytona 500. Esto marcó una similitud significativa, ya que Logano se convirtió en el primer piloto desde Johnson en lograr esta hazaña y ganar el campeonato en el mismo año.
- Dinámicas de Equipo: En 2008, Hendrick Motorsports celebró su tercer campeonato consecutivo, reflejando el logro idéntico de Team Penske en 2024.
- Finales 1-2 del Daytona 500: En un giro peculiar, el Daytona 500 de 2008 vio a los compañeros de equipo de Penske, Ryan Newman y Kurt Busch, terminar en las posiciones 1-2 mientras Johnson estaba en la pole. Avanzando a 2024, los pilotos de Hendrick Motorsports, William Byron y Alex Bowman, replicaron el final 1-2, con Logano (un piloto de Penske) en la pole.
- Conexión “Michael”: De pie junto a Johnson y Logano en sus fotos de pole en Daytona están Michael Waltrip (2008) y Michael McDowell (2024), ambos ganadores de sus primeros Daytona 500 en años que terminan en “1” (2001 y 2021, respectivamente). Ambos Michaels también estaban en sus mediados a finales de los 30 años en el momento de sus primeras victorias, añadiendo otra capa inquietante a los paralelismos.
Un Legado de Resiliencia
Más allá de las conexiones cósmicas, el desempeño de Logano esta temporada fue un testimonio de su determinación y adaptabilidad. Al igual que Johnson, Logano mostró una capacidad para capitalizar oportunidades y mantener la compostura bajo presión. Reflexionando sobre su carrera, Logano expresó la resiliencia que define a los grandes campeones:
“Ha sido toda mi carrera, desde el principio. Así es como es. Tengo piel gruesa. Que venga.”
Logano también se unió a Johnson en otra tradición—el Diario de Campeones, un ritual que Johnson comenzó en 2016. Como contribuidor en dos ocasiones, Logano ocupa un lugar único en esta tradición, subrayando los crecientes paralelismos entre las carreras de los dos pilotos.
¿Es Destino o Simple Brillantez en las Carreras?
Mientras algunos aficionados se preguntan si fuerzas cósmicas se alinearon para otorgarle a Logano su tercer título, otros ven estas coincidencias como un testimonio de la naturaleza cíclica del deporte. Los paralelismos con la temporada de Johnson en 2008, las peculiares conexiones “Michael” y la asombrosa habilidad de Logano para destacar en años pares pueden parecer sobrenaturales. Pero en el corazón de todo esto se encuentra la notable habilidad y determinación de un piloto que ha demostrado una y otra vez por qué pertenece a la élite de NASCAR.
Ya sea destino o pura brillantez, la temporada 2024 de Logano será recordada como una de resiliencia, redención y, quizás, un toque de magia de NASCAR.