Federico Foschini es un hombre que sabe cómo vender un sueño. El Director de Marketing y Ventas de Lamborghini tiene la misión de convencer a los entusiastas de que la última creación de la marca, el Temerario, no es solo un reemplazo del Huracán, sino una revolución. Cuando se le pregunta si los fanáticos extrañarán el V-10 del Huracán, la respuesta de Foschini es enfática: «No es un cambio de V-10 a V-8, es de 10 a 10,000». Se refiere a las 10,000 revoluciones por minuto del Temerario, una cifra que subraya el compromiso de Lamborghini de empujar los límites, incluso en su transición a un motor V-8.
El nuevo V-8 biturbo del Temerario puede perder dos cilindros en comparación con el Huracán, pero gana en casi todos los demás aspectos. Lamborghini ha construido este motor desde cero, asegurándose de que se destaque de cualquier otra opción en el mercado, incluidas las ofertas V-8 de Audi. «No hay otro motor con estas características», afirma con orgullo Foschini. No se trata solo de un V-8 biturbo estándar; es una obra maestra de 789 caballos de fuerza que alcanza los 920 caballos de fuerza cuando se combina con su asistencia híbrida. ¿El resultado? Un automóvil que está tocando la puerta del territorio de los superdeportivos mientras conserva el alma de un Lamborghini.
A diferencia del Huracán, la mecánica del Temerario es completamente exclusiva. El motor cuenta con una disposición en «V caliente» de 90 grados, un cigüeñal plano y dos turbocompresores que generan 36 psi de presión de sobrealimentación. Materiales ligeros como las culatas de aleación de aluminio y las bielas de titanio aseguran que el motor se mantenga ágil a pesar de su potencia, mientras que la tecnología avanzada como los seguidores de dedo recubiertos de Carbono-Diamante (DLC) garantizan la confiabilidad a altas RPM. Esta atención al detalle permite que el V-8 entregue una impresionante potencia de 197 caballos de fuerza por litro, una cifra que incluso el más exigente aficionado a los motores no puede ignorar.
Pero no se trata solo de potencia. Foschini está seguro de que el Temerario ofrece una experiencia de conducción distinta en comparación con el Revuelto, el hipercoche híbrido de Lamborghini con motor V-12. A pesar de su cercanía en potencia, con el Revuelto superando al Temerario por 81 caballos de fuerza, Foschini enfatiza que estos autos satisfacen diferentes necesidades. El Temerario, con su estructura más pequeña y versátil y su manejo más preciso, está diseñado para ser tan emocionante en una carretera sinuosa como en una pista. «Están respondiendo a diferentes necesidades, y está claro que muchos clientes comprarán ambos», comenta Foschini, resaltando la estrategia de Lamborghini de ofrecer experiencias distintas pero complementarias.
El cambio hacia la electrificación es otro hito para Lamborghini. Con el Revuelto, Urus y ahora el Temerario, toda la línea de la marca está hibridada. Pero esto no ha sido sin desafíos. La adición de las baterías inevitablemente aumenta el peso, un enemigo común en los autos de alto rendimiento. Sin embargo, Lamborghini ha abordado esto de frente al integrar inteligentemente la batería en el túnel central, manteniendo el centro de gravedad del automóvil bajo y conservando un chasis equilibrado y ágil. Incluso con 3,725 libras, el Temerario está preparado para superar al Huracán en la pista, gracias a su avanzado sistema de vectorización de par y sus dos motores delanteros.
Mientras que el Huracán y el Gallardo fueron iconos en su época, el Temerario está listo para superarlos, tanto en rendimiento como en exclusividad. Lamborghini no tiene como objetivo inundar el mercado; se centran en mantener la exclusividad y los altos valores residuales, asegurando que cada Temerario siga siendo una posesión preciada.
Está previsto que salga al mercado a principios del próximo año, el Temerario se espera que tenga un precio en el rango de los $400,000, ligeramente más alto que el Huracán saliente. Si los fanáticos aceptarán el V-8 está por verse, pero con su motor exclusivo, poder impresionante y precisión electrificada, es probable que el Temerario se convierta en un clásico moderno por derecho propio. La última oferta de Lamborghini no es solo un nuevo automóvil, es una declaración audaz de que el futuro de los superdeportivos sigue siendo emocionante y exclusivo como siempre.