Treinta millones es un número grande para el sector de yates usados y digno de una embarcación de placer verdaderamente impresionante. Con su silueta intimidante, pedigrí estadounidense y lujosas comodidades a bordo, Hospitality cumple con los requisitos.
El Westport de 2011 cambió de manos este mes por $29.7 millones después de más de un año en el mercado.
Hospitality nació para tener un gran destino. Formó parte de la serie Westport 164 lanzada en 2006, compuesta por algunos de los yates más grandes jamás construidos por este astillero y hechos completamente de fibra de vidrio. Vongo fue el primero en ser lanzado, pero Hospitality rápidamente se convirtió en el más exitoso de la serie.
Con nombres como Donald Starkey y William Garden detrás de él, el prestigio de Hospitality estaba garantizado. Westport en sí es uno de los nombres más importantes en la historia de la construcción naval de Estados Unidos. Especializándose en embarcaciones comerciales, gradualmente se trasladó a yates de lujo de entre 30 y 50 metros.
Este Westport 164 fue renovado en 2016 y 2021. Está diseñado para alojar hasta 16 invitados en siete lujosos camarotes. La suite principal se destaca como un apartamento independiente con comodidades de primera clase, una sala de estar/oficina privada separada y acceso a una cubierta privada. Una de las comodidades más versátiles a bordo es el gimnasio totalmente equipado, que se puede convertir en una sala de masajes o un spa de lujo.
Un yate de lujo de alquiler con éxito comprobado, el Hospitality de 49 metros (154 pies) también fue visto en la famosa celebración de Año Nuevo de St Barth, conocida como un «enfrentamiento de superyates». También se relacionó con el nombre del millonario estadounidense Patrick Willis, quien hasta ahora era el presunto propietario. Willis es uno de los millonarios hechos a sí mismos con una clásica historia de ascenso desde la pobreza. Comenzó a trabajar en la industria de la recuperación de automóviles cuando solo tenía 16 años y terminó siendo el propietario de American Recovery Service, la compañía nacional de recuperación de automóviles más grande del mundo.
Como su nombre sugiere, Hospitality fue equipado específicamente para satisfacer las necesidades de sus huéspedes de alquiler e incluso superar las expectativas. Por más de $200,000 por semana, los huéspedes se benefician de los alojamientos flexibles de este yate, sus hermosas áreas al aire libre y su amplia selección de juguetes acuáticos. Además de su tamaño y volumen, esta bestia estadounidense cuenta con un alcance transatlántico de 4,000 millas náuticas (7,400 km) y un historial comprobado.
El superyate Hospitality de 2011 cambió de manos por casi $30 millones y, muy probablemente, el nuevo propietario continuará cosechando los beneficios de sus operaciones de alquiler. Por ahora, Hospitality sigue en la flota de alquiler de IYC, la misma compañía que completó la venta interna.
