A medida que se acerca el Daytona 500, una controversia latente sobre las restricciones de práctica de NASCAR ha llevado a los pilotos a expresar su opinión: ¿deberían los equipos tener la opción de practicar o no?
La temporada 2025 de NASCAR apenas ha comenzado, y sin embargo, el deporte ya enfrenta críticas agudas de algunas de sus figuras más respetadas. Con solo unos días para el Daytona 500, un tema candente ha generado debate en el garaje: la falta de tiempo de práctica adecuado.
Desde que COVID-19 obligó a NASCAR a reducir las sesiones de práctica en 2020, los equipos se han quedado con solo 25 minutos de tiempo en pista antes de la mayoría de las carreras. Incluso para Daytona, el espectáculo más grande del deporte, NASCAR solo ha duplicado esa ventana a 50 minutos—una gran diferencia con respecto a las sesiones de dos horas que los equipos solían tener.
Para Brad Keselowski y Dale Earnhardt Jr., esto no es solo un inconveniente—es un serio problema competitivo que podría estar afectando la calidad de la carrera.
La solución directa de Dale Jr.: Dejar que los equipos decidan
A medida que JR Motorsports hace su histórica debut en la Serie de la Copa este fin de semana, Dale Earnhardt Jr. tiene mucho en juego. Sabe que los nuevos equipos y las organizaciones con poco financiamiento necesitan práctica para igualar el campo de juego. Por eso, apoya la solicitud de Brad Keselowski para sesiones de práctica más largas—pero con un enfoque flexible y sensato.
“Aquí hay una idea,” escribió Earnhardt Jr. en las redes sociales.
“Abre la pista para practicar. Si no quieres practicar, no practicas. Si quieres practicar, practicas. Sé que es una idea loca, pero ¿creerías que usaron este método durante décadas sin quejas reales?”
Es un argumento simple pero poderoso: Deja que los equipos elijan si quieren usar el tiempo en pista en lugar de imponer una política de talla única que no sirve para todos.
Advertencia de Keselowski: La práctica es “100% necesaria” para el futuro de NASCAR
Brad Keselowski, un defensor abierto de sesiones de práctica aumentadas, reafirmó el tema después de experimentar problemas en la práctica de Daytona 500.
Su advertencia fue clara:
“100% necesario para la salud a largo plazo del automovilismo.”
La preocupación de Keselowski no se trata solo de la preparación de los conductores, sino del futuro entero de NASCAR.
- Con práctica limitada en pista, los equipos dependen en gran medida de tecnología de simulación costosa para prepararse.
- Eso significa que la reducción de costos en realidad no ocurre—simplemente desplaza el gasto hacia la modelización virtual en lugar de la experiencia del mundo real.
- Los equipos más pequeños todavía luchan mientras que las organizaciones de primer nivel como Joe Gibbs Racing y Team Penske obtienen una ventaja aún mayor.
Y Keselowski debería saberlo—él es tanto un dueño de equipo como piloto en RFK Racing. Si alguien entiende el impacto financiero y competitivo de la práctica limitada, es él.
¿Cuál es el objetivo final de NASCAR? Ahorro de costos vs. Integridad competitiva
La razón oficial de NASCAR para reducir las sesiones de práctica siempre ha sido el control de costos. Pero, ¿realmente ahorra dinero?
Keselowski explicó el problema perfectamente en 2024:
“Invertimos mucho dinero y tiempo en la simulación de coches de carrera. Ya sea simulando el coche de forma estática con cómo se comportaría aerodinámicamente en consideración a otras cosas o si es un modelo de física de múltiples cuerpos, que simula el coche yendo alrededor de la pista.”
¿Traducción? Los equipos no están gastando menos dinero, simplemente lo están gastando de diferentes maneras. Y algunos argumentarían que el tiempo de pista en el mundo real es una inversión mucho mejor que los modelos computacionales que no pueden replicar completamente las condiciones de carrera.
Las Consecuencias: ¿Podría NASCAR Cambiar de Curso?
No es la primera vez que los pilotos han chocado con NASCAR por el tiempo de práctica, pero con superestrellas como Earnhardt Jr. y Keselowski liderando la carga, la conversación ha alcanzado un nuevo nivel.
Con el Daytona 500 a solo unos días, la controversia está ganando impulso—y si más pilotos se pronuncian, NASCAR podría verse obligado a repensar su postura rígida sobre las sesiones de práctica.
Una cosa es cierta: el debate está lejos de terminar, y si los pilotos siguen presionando el tema, NASCAR podría enfrentarse pronto a su mayor cambio de política en años.