En su debut con Red Bull en el Gran Premio de Australia de 2025, el neozelandés Liam Lawson experimentó una salida temprana, sin lograr avanzar más allá de la primera etapa de clasificación (Q1). A pesar de un comienzo desafiante, Lawson se mantiene optimista sobre las futuras carreras y atribuye su salida temprana a una combinación de factores, incluida la inexperiencia con el circuito de Albert Park y un problema con la unidad de potencia de su RB21.
Lawson, el único piloto que nunca ha competido en el circuito de Melbourne antes, se encontró atrapado en la zona de eliminación al principio de la ronda de clasificación. Este contratiempo se vio agravado por un problema con la unidad de potencia que previamente le había impedido participar en la tercera sesión de prácticas el sábado por la mañana. Aunque los ingenieros de Red Bull lograron solucionar el problema a tiempo para la ronda de clasificación, la falta de experiencia en pista y tiempo de práctica de Lawson claramente obstaculizaron su rendimiento.
Su tiempo en la pista se vio aún más empañado por un incidente fuera de la pista en la Curva 3, que interrumpió su secuencia de vueltas rápidas. A pesar de esto, Lawson logró mantener su coche fuera de la grava y reincorporarse al circuito. Sin embargo, este incidente le impuso una presión inmensa para su última vuelta.
La última vuelta de Lawson parecía prometedora al principio, pero un pequeño error en la Curva 10 le obligó a reducir la velocidad. Un deslizamiento posterior en la penúltima curva le convenció de abortar la vuelta y regresar a los pits, sabiendo que no mejoraría su posición.
Reflexionando sobre los eventos, Lawson admitió a Sky F1 que había anticipado un comienzo difícil en la clasificación. Esperaba mejorar gradualmente su rendimiento a lo largo de la sesión, pero su excursión fuera de la pista interrumpió esta estrategia. Lawson también señaló que los neumáticos comenzaron a degradarse hacia el final de su última vuelta, un problema recurrente durante el fin de semana y algo que no se abordó durante la sesión de prácticas que se perdió.
Lawson se mantuvo positivo, sin embargo, creyendo que en circunstancias diferentes, podría haber mejorado lo suficiente como para avanzar a Q2. Notó que estaba medio segundo adelante antes de la Curva 9, pero un deslizamiento en las Curvas 9 y 10 causó que los neumáticos se sobrecalentaran, afectando su rendimiento en el último sector.
A pesar del contratiempo, Lawson expresó optimismo sobre las futuras carreras, especialmente a la luz de que su compañero de equipo Max Verstappen aseguró el tercer lugar en la parrilla. Aunque reconoció que su falta de práctica hizo que el día fuera desafiante, ve la experiencia como una lección valiosa para las próximas carreras. La determinación y positividad de Lawson sugieren que, a pesar de este contratiempo inicial, es alguien a tener en cuenta en futuras carreras de Gran Premio.