Red Bull ha causado revuelo al despedir a Christian Horner como jefe del equipo de Fórmula 1, enviando ondas de choque a través de la comunidad de carreras.
Horner, al frente de Red Bull desde 2005, ahora enfrenta un escrutinio al abandonar un puesto en el que trabajó arduamente para establecer un legado. Tal como están las cosas ahora, la carga recae en el manager de Verstappen, quien declara públicamente que es deber de Red Bull arrojar luz sobre la situación.
A pesar de que Horner se ha despejado en gran medida de las acusaciones en su contra de 2024, gran parte de la industria percibe el bajo rendimiento de Red Bull y la pérdida de empleados significativos como un reflejo dañino sobre Horner y su gestión. Con los rumores en curso sobre un posible movimiento de Verstappen a Mercedes, este período caótico hace que el escenario sea aún más tentador.
Al liderar el equipo de Verstappen, el manager Raymond Vermeulen optó por no comentar sobre los detalles de la situación. Sin embargo, como se ha informado, es responsabilidad de Red Bull explicar la razón detrás de la salida de Horner. Vermeulen ha reiterado el enfoque de Verstappen en asegurar que el equipo sea más rápido que la competencia.
Con la especulación desbordante, sigue siendo un misterio cómo Red Bull abordará las repercusiones y aclaraciones en torno a la repentina partida de Horner. La comunidad de Fórmula 1 está, de hecho, llena de preguntas sobre Red Bull Racing, y especialmente sobre el posible próximo movimiento profesional de Verstappen.