Kyle Busch, una figura prominente en el mundo de NASCAR, siempre ha tenido una visión clara de lo que quiere: el campeonato. Su incesante búsqueda de este objetivo, en lugar de simplemente apuntar a victorias en los playoffs, es lo que lo distingue del resto. Esta mentalidad de campeonato se reveló por primera vez en 2013, cuando Busch expresó su preferencia por ganar un campeonato en lugar de una victoria en una carrera de playoffs.
En la actualidad, el enfoque de Busch sigue siendo el mismo. Su enfoque láser en el campeonato, en lugar de simplemente ganar carreras para clasificar a los playoffs, fue recientemente destacado por el veterano de NASCAR, Kyle Petty. En el podcast Fast Track de Performance Racing Network, Petty iluminó la feroz ambición de Busch, señalando que el objetivo final de Busch es ganarlo todo.
Una rápida mirada al récord de Busch da credibilidad a las observaciones de Petty. Busch ha llegado a los playoffs 11 veces y ha logrado convertir dos de esas oportunidades en campeonatos de la Copa Series en 2015 y 2019. Su segundo lugar en la carrera del campeonato de 2017 subraya aún más su determinación de alcanzar el primer puesto.
Petty también destacó las actitudes contrastantes de otros pilotos que están contentos con solo una victoria para asegurar un lugar en los playoffs. La infame victoria de Austin Dillon en el Richmond Raceway en 2024 sirve como un ejemplo principal. Dillon causó un accidente que eliminó a Joey Logano y Denny Hamlin de la carrera, asegurando su victoria. Sin embargo, NASCAR le quitó su lugar en los playoffs por este acto deliberado, aunque retuvo la victoria. Busch, a pesar de ser compañero de equipo de Dillon en Richard Childress Racing, ha demostrado consistentemente una mentalidad diferente, siempre fijando su mirada en el título de campeón.
A pesar de su encomiable impulso, la temporada 2025 de Busch ha estado marcada por una serie de eventos desafortunados. Desde verse involucrado en un accidente en Daytona, perder varios lugares en Atlanta debido a un incidente con Carson Hocevar, hasta perder la delantera en COTA debido a una bandera de precaución, las victorias de Busch le han eludido. Su racha sin victorias ahora se extiende a 60 carreras, sin embargo, su compromiso por asegurar el campeonato sigue siendo inquebrantable.
La próxima Shriners Children’s 500 en Phoenix Raceway presenta otra oportunidad para que Busch rompa su racha sin victorias. Con tres victorias en Phoenix en su historial, Busch tiene un comprobado récord de éxito en este lugar. Sin embargo, sus actuaciones recientes en Phoenix han sido menos que estelares, terminando fuera del top-20 en sus últimas tres carreras.
A medida que Busch se prepara para la Shriners Children’s 500, su familiaridad con el exigente circuito podría proporcionarle una ventaja competitiva. Sin embargo, debe evitar los errores que le han costado victorias anteriores. La pregunta sigue siendo: ¿Será la Shriners Children’s 500 la carrera donde Kyle Busch finalmente rompa su racha sin victorias y dé un paso más cerca de sus aspiraciones de campeonato? Solo el tiempo lo dirá.