En una revelación impactante, se ha descubierto que el ícono de NASCAR, Jeff Gordon, estuvo al borde de hacer un movimiento revolucionario hacia la Fórmula 1, una decisión que podría haber revolucionado el deporte en América décadas antes. El comentarista principal de IndyCar en FOX y periodista experimentado de Fórmula 1, Will Buxton, discutió esta sorprendente posibilidad en el podcast Happy Hour de Kevin Harvick, enviando ondas de choque a través del mundo del automovilismo.
Buxton reveló que hubo discusiones para que Gordon se uniera a Team Cool Green en IndyCar mientras que el tres veces campeón de Indy 500, Dario Franchitti, se trasladaría a BAR (British American Racing) en Fórmula 1. El plan era que Gordon y Franchitti eventualmente se convirtieran en compañeros de equipo en BAR, un movimiento que sin duda habría elevado el perfil de la F1 en los Estados Unidos mucho antes de que la popular serie «Drive to Survive» entrara en juego.
Aunque este ambicioso cambio estaba programado para llevarse a cabo alrededor de 1999, finalmente nunca se materializó. A pesar de nunca haber tenido la oportunidad de competir en F1, Gordon participó en un memorable intercambio de vehículos con Juan Pablo Montoya, mostrando sus impresionantes habilidades al volante de un Williams FW25 en 2003.
La conversación no se detuvo ahí, ya que el podcast también profundizó en las aspiraciones de la actual sensación de NASCAR, Kyle Larson, quien ha expresado interés en probar las aguas de la Fórmula 1. Buxton expresó su deseo de ver a más pilotos de diferentes disciplinas de carreras cruzar a la F1, criticando el sistema de licencias restrictivo que a menudo dificulta tales transiciones.
Las regulaciones existentes incluso han impedido que la estrella emergente de IndyCar, Colton Herta, pueda dar el salto a la F1 debido a los estrictos requisitos de superlicencia. Buxton destacó la disparidad en cómo se valoran los logros en varias series de carreras cuando se trata de calificar para una superlicencia de F1, enfatizando la necesidad de un enfoque más inclusivo que permita que el talento de diversos orígenes brille en el escenario global.
A medida que el mundo del automovilismo continúa evolucionando, la tentadora perspectiva de que pilotos como Jeff Gordon y Kyle Larson den el salto a la Fórmula 1 sirve como un recordatorio del potencial no explotado y la emoción que podría desarrollarse en la escena internacional de carreras.