La Desesperación de Alpine en México: Una Carrera para Olvidar para Colapinto y Gasly
En una exhibición desalentadora en el Gran Premio de México, el equipo Alpine se encontró en la parte trasera del grupo, dejando a los pilotos Franco Colapinto y Pierre Gasly lidiando con la cruda realidad de las limitaciones de su coche. Al ondear la bandera a cuadros, el dúo cruzó la línea de meta en las últimas posiciones, subrayando un período tumultuoso para el equipo que actualmente languidece en el fondo de la clasificación del Campeonato de Constructores.
«No esperaba que la carrera fuera tan larga,» lamentó Colapinto, aún en busca de sus primeros puntos de la temporada. «Hicimos nuestro mejor esfuerzo para maximizar el rendimiento del coche. Pasamos muchas vueltas con neumáticos duros, pero al mirar los tiempos por vuelta, simplemente no éramos competitivos. Éramos dolorosamente lentos con ese compuesto. Quizás pasamos demasiado tiempo con él, pero cuando eres lento, simplemente te quedas más atrás.»
En medio del caos y la frustración, hubo un rayo de esperanza en el último stint. Colapinto señaló: «El último stint con neumáticos blandos fue muy prometedor. Fui rápido. Cuando tengo agarre y el coche responde, puedo ser veloz. Estoy contento por eso, pero se ve ensombrecido por mi decepción con el ritmo general y el resultado final.»
Gasly, quien terminó justo delante de su compañero de equipo, expresó sentimientos similares, manifestando una feroz determinación para revertir la situación en el próximo Gran Premio. «Seguiremos empujando y esperamos un mejor rendimiento en Brasil,» afirmó. «Sin embargo, hemos tenido múltiples carreras así, y hoy sentimos que no aprovechamos las oportunidades. Podríamos haber terminado 15 segundos adelante. Analizaremos todo y buscaremos mejorar para la próxima carrera.»
A medida que Alpine se dirige a Brasil, está a 40 puntos de distancia de Kick Sauber. Sin embargo, Gasly recordó a los aficionados el potencial de regreso del equipo, rememorando el sorprendente doble podio del año pasado en condiciones desafiantes. Este recuerdo mantiene viva la chispa de esperanza mientras fijan su mirada en la próxima ronda del campeonato.
En el mundo de alta presión de la Fórmula 1, la presión es implacable, y para Alpine, el tiempo de excusas ha terminado. El Gran Premio de Brasil se avecina, y el equipo debe resurgir de las cenizas si espera salvar su temporada. Con los ojos del mundo del automovilismo sobre ellos, ¿podrán ofrecer el rendimiento que los aficionados tanto anhelan? Solo el tiempo lo dirá.












