En un giro impactante de los acontecimientos, la estrategia del ala flexible de Red Bull en el Gran Premio de Mónaco los ha dejado luchando por puntos mientras McLaren gana terreno. El Director del Equipo, Christian Horner, admite haber tomado un riesgo que no dio frutos, dejándolos 25 puntos por detrás de su objetivo.
Desde el triunfo en Imola hasta un deslucido cuarto lugar en Mónaco, el rendimiento de Red Bull ha sido una montaña rusa. La carrera en Mónaco vio a Max Verstappen impedido por Lewis Hamilton, afectando finalmente su posición de salida. A pesar de un tercer lugar logrado por Oscar Piastri, Red Bull ahora se encuentra 25 puntos por detrás del liderato del campeonato.
Horner reveló que su tirada de dados estratégica en Mónaco no logró los resultados deseados. El equipo contaba con un Safety Car o un evento similar para cambiar la situación a su favor, ya que adelantar en la pista resultó ser casi imposible. La decisión de extender la estancia de Verstappen salió mal, mientras que traer a Tsunoda temprano inicialmente parecía prometedor pero finalmente no dio resultados.
Con McLaren ganando impulso de manera constante, Horner sigue siendo optimista pero reconoce el difícil camino por delante. El enfoque del equipo ahora se dirige a la próxima carrera en Barcelona, donde buscan cerrar la brecha y volver a encaminarse hacia sus ambiciones de campeonato. Este revés sirve como un recordatorio contundente de la feroz competencia en el mundo de la Fórmula 1, donde cada decisión puede hacer o deshacer las aspiraciones de un equipo por el título.