Donald Trump tiene fuertes conexiones en el mundo del automovilismo. El ex presidente de Estados Unidos y actual candidato del Partido Republicano para las elecciones de 2024 es conocido por su gran interés en el automovilismo, especialmente en la NASCAR. Mientras estaba en el cargo en la Casa Blanca, asistió a la Daytona 500 y este año fue invitado especial en la Coca Cola 600.
Recientemente, durante un mitin electoral en Charlotte, Carolina del Norte, una ciudad conocida por sus apasionados fanáticos de las carreras, Trump hizo algunas declaraciones audaces. Sugirió la idea de reemplazar a los generales militares de Estados Unidos con pilotos de NASCAR o propietarios de equipos, elogiando sus cualidades de liderazgo.
Trump mencionó específicamente al multimillonario propietario de equipos de NASCAR e IndyCar, Roger Penske, como una buena opción para este papel. Penske tiene un historial exitoso como propietario de equipos, con numerosos campeonatos y victorias en ambos campeonatos. Trump cree que si estas personas pueden lograr tanto éxito en el automovilismo, pueden hacer lo mismo en el ámbito militar.
No contento con eso, Trump también sugirió que los entrenadores de fútbol podrían ser excelentes reemplazos para los generales. NASCAR tiene su propio ejemplo de un gran entrenador de fútbol en Joe Gibbs, miembro del Salón de la Fama y propietario de equipos ganador de campeonatos con JGR.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que estas declaraciones probablemente fueron hechas en tono de broma por el ex presidente, con el objetivo de atraer a las apasionadas bases de fanáticos de ambos deportes en el estado. Los estilos y sistemas de liderazgo requeridos en el ámbito militar y deportivo son muy diferentes.